Fanfic Name / Nombre del Fanfic: Robotech Còdigo Enigma

Chapter / Capitulo: 5. Vuelta por el Universo

Author / Autor: Strato Nayar

Rating / Clasificacion: AP (All People = Todo espectador)

Romance

Action / Accion

Alternate Universe / Universo Alterno

Fanfic: Vuelta por el Universo 
 
Cuando por fin los programadores, analistas y criptólogos de la 7ª flota habían logrado contener el ataque virtual, recibían alerta de un ataque real. A menos de 400 Km. apareció una gran flota enemiga. Esta vez no eran los destartalados cruceros hechos con chatarra de otras naves, sino unas naves nuevas con una curiosa forma de cohombrillo de mar. Ambas flotas estaban a 3.000 Km. de la superficie de Éden. Se intercambiaron los primeros disparos, mientras del crucero “Roy Fokker” se emitía la desesperada llamada: “Ataque enemigo en curso. No es un simulacro. Todas las unidades diríjanse al sector 502” 
Todos los pilotos se apresuraron a la voz de alerta. En todas las naves se vio al personal militar corriendo a sus puestos. Por suerte para ellos, el Emerald Force estaba de turno en sus barracas, por lo que no tardaron en abordar sus cazas. El escuadrón fue lanzado al espacio en modo caza por brazos automatizados, debido al peso adicional que cargaban con los FAST packs. Para cuando el escuadrón estuvo completo en el espacio, el enemigo había sobrepasado rápidamente el anillo externo de defensa, y “volaban” directo hacia la “Macross 7”.  
Gamurin, junto con los escuadrones de la Macross 7 viraron hacia la izquierda. Hacia ese costado, sobre la carlinga (con tecnología HUD envolvente) vio proyectadas las marcas de los objetivos y se dirigieron allá: 
-“disparen todos los misiles” 
Eliminaron a varios, tras lo cual Gamurin tocó la pantalla de su VF-17 y se proyectó la imagen de líder wespen: 
-“Líder Emerald a Líder Wespen. Nosotros te cubrimos ahora.” 
-“Entendido. ¿Qué hacemos si viene ese loco con el prototipo robado?” 
-“La orden es ignorarlo. Se cree una especie de hacker con ideales pacifistas. Tratar de auxiliarlo sólo pondría en peligro la operación.” 
-“Entendido.” 
Los novísimos cruceros barauta dispararon sus cañones pesados hacia el anillo medio del sistema de defensa, donde algunas naves perdieron sus campos deflectores por caída de sistemas digitales. Las demás se dispersaron, que era al parecer, lo que querían los barauta. Blake le indica: 
-“Están formando una especie de túnel con su artillería.” 
-“Recibido Blake. Debemos quedar al interior del túnel. Manténgase agrupados, no permitan que el núcleo de la flota quede aislado” 
-“Entendido” 
-“Chequeen programas y sistemas. Apliquen directiva de seguridad 4” 
-“Entendido” 
Miró las pantallas e indicadores de su propio caza, sobre todo para asegurarse de que no estuviesen infiltrados los sistemas mas importantes. Luego dijo: 
-“Datos desde el crucero indican 10 unidades enemigas. Enviando diagrama de ubicación.” 
Apenas sobrepasaron el crucero, volaron en zig-zag, descargando sus micromisiles, lo que provocó la dispersión del enemigo, pero 3 de ellos pasaron a modo guardián y descargaron los suyos propios. Kizaki los eliminó con la torreta láser, despejando su campo visual. De pronto Blake le indica: 
-“Emerald 2 a líder Emerald. Gran ola de ataque enemigo bajo “horizonte” a las 2.” 
Así lo vio. Por debajo de la “Macross 7” venía una gran cantidad de unidades enemigas. Inmediatamente escuchó el llamado de control de vuelo de la nave. Veía gran cantidad de naves enemigas, por lo que todas las unidades se dirigieron a dar apoyo a la nave. Cuando estaba a unas 4 millas de esta, Hughes lo llama: 
-“Emerald 3, pierdo señal del enemigo. Radar en blanco.” 
-“Emerald 2, señal se desvanece.” 
-“Aquí líder Emerald. Disparen a voluntad” 
-“Entendido.” 
Gamurin pasó a modo Battloide para tener mas flexibilidad en el disparo. Apuntó a uno de los enemigos, dándole de lleno en el fuselaje...y quedó mudo de asombro. Las balas habían pasado a través del caza y tardó unas pocas décimas de segundo en comprender que sólo era un holograma. A cierta distancia vio otro ejemplar del FBZ-99 Zaubergran. Desde este fueron lanzados decenas de micromisiles, una verdadera cortina de estos. Gritó: 
-“Formación defensiva. Lancen los pulsos.” 
Así se hizo. Disparó su cañón y su torreta láser, pero seguían llegando mas misiles. Además, una buena parte sólo eran señuelos, por lo que desperdició balas y láser. Sólo se pudieron salvar por que en ese momento Mathausen, líder Wespen, le disparó 1 misil con pulso electromagnético al enemigo. Inmediatamente se quemaron sus proyectores holográficos. Blake dijo: 
-“3 mechas enemigos inutilizados.” 
A esto siguió una calma asombrosa, que hizo que suspiraran. Kizaki se sacó 1 momento el caso y se limpió el sudor de la cara, sólo para sentir un espasmo al escuchar un llamado de la torre de control. En todas las pantallas la oficial Sparrow indicaba: 
-“Ola de ataque sobre “horizonte”. No es un señuelo.” 
Gamurin palideció inmediatamente. Por su cabeza cruzó fugazmente la imagen de Mylene y murmuró su nombre, pero decidió concentrarse. Para cuando se asomaron por sobre el domo de “Ciudad 7” ya la cubierta se estaba cerrando sobre el domo de cristal. De pronto vieron con horror que sobre este habían unidades enemigas tratando de romper el cristal del domo. Llamó:  
-“Líder Emerald a Líder Wespen. Todos los Nightmares preparen su cañón de pulso láser. Contamos con los Thunderbolts para cubrirnos.” 
-“entendido.” 
En el cristal de la cabina, frente a él se amplificó la imagen. Se veían 3 de esas alas volantes en modo battloide, y su aspecto era una mezcla exacta entre un guerrero beta y un invid tipo gurab o fuerza de choque. Estaban rodeados de varias docenas de “109s”. Entonces Kizaki pulsó un botón en el panel de armas, a su derecha. Su battloide abrió un compartimiento de su pierna derecha y de allí extrajo 1 artefacto que acopló a su ametralladora. Era un cañón láser de alto impacto con el que estaban equipados los Nightmares de operaciones especiales y podía destruir un mecha o un cañón de crucero de un solo disparo, teniendo además un alcance de centenares de kilómetros. Apuntaron sus cañones y dispararon. Uno de los “99” explotó, así como varios “109”, pero los demás sólo tuvieron una distorsión de imagen antes de desvanecerse.  
Mientras tanto, Enigma se contacta con la comandante Sigil, que iba a bordo de 1 de los nuevos varitechs de los barauta. Le dice: 
-“Ahora efectúa una nueva infiltración. Yo apoyaré desde acá.” 
Enigma comenzó a apoyar. A bordo del “Ojo de Lince” 4B7 lograron interceptar una transmisión que decía: “Deben recuperar la matriz de protocultura a cualquier costo...”. Intentaron contactar con control de vuelo de “Battle 7” pero fueron invadidos por el sopor y el desaliento que los empezó a cubrir como melaza. Ellos, así como la gran mayoría de los soldados de la UN Spacy intuían que esa sensación era artificial, un arma enemiga, por lo que se habían entrenado para ello. Aún así eso bastó para desconcentrarlos y llevarlos a encender erróneamente una conexión con la red civil.  
El domo de “Cuidad 7” estaba ya cerrado y los civiles ya se encontraba en sus refugios. No obstante, como resultado de virus IA infiltrados en la red civil, se volvieron a encender las pantallas de la red de información pública. Entonces los virus descargaron archivos de imagen. 
En todas las pantallas se veía a la comandante Sigil dando la orden de buscar la matriz de protocultura. Entre los civiles el impacto fue inmediato, ya que la señal también llegó a las pantallas de los refugio. En el puente de mando de “Battle 7”, Exedore hablaba con Max: 
-“Gran parte de la flota externa está fuera de combate y el enemigo ha usado señuelos masivamente.” 
-“¿Qué hay de los civiles?”  
-“En la red civil de la nave está circulando un comunicado enemigo demandando la entrega de la matriz de protocultura.” 
-“¿Qué?” 
-“Como lo oye, señor. Además, viene una nueva oleada” 
-“Bien, la situación es crítica. Su ataque ha sido mucho mas potente y además nos ponen al descubierto. Todos los civiles saben lo que pasaba con el SDF-1 en la 1ª guerra robotech y van a protestar por haberlos puestos en la misma situación. Solo queda una salida.” 
Max, haciendo un esfuerzo sobrehumano por sobreponerse al desaliento, activó una secuencia en su tablero de mandos, introdujo unas coordenadas y esperó, sin decirle nada a nadie. Mientras tanto, varios escuadrones, entre ellos el “Emerald Force” habían ido al conector del crucero con la sección civil, pues los barauta trataban ahora de entrar por ahí. Cuando terminaron de barrerlos, el enlace con el radar del crucero le indicó que se aproximaba otra ola de ataque, pero no alcanzó a verla. En su lugar vio por todo el cielo infinidad de pulsos luminosos, así como nubes fosforescentes de distintos colores. Comprendió que la Macross 7 y todas las naves en un radio 30 millas de esta habían entrado en transposición 
 
II 
 
Cuando reingresaron al espacio normal, Max comprobó que ninguna nave enemiga los había seguido. Por la ventana se veía 1 planeta rocoso, prácticamente sin atmósfera. Inmediatamente le ordenó al oficial de navegación estelar, 1 tiresiano de nombre Hanto Luxor: 
-“Hanto, verifique posición de “Macross 7” y las naves que pudieron acompañarla.” 
Luxor le contestó a Max (con una voz bastante fina, que provocó sonrisas): 
-“Almirante Sterling, estamos en la misma galaxia en las coordenadas que usted indicó. Nos acompañaron todas las naves civiles con sus correspondientes cruceros Megalord de escolta, mas 4 naves clase Tokugawa y 10 naves clase Garfish.” 
-“Correcto. Dígame por favor en que lugar nos encontramos exactamente.” 
-“Esto estaba en la frontera entre el imperio Tiresiano y la Hegemonía Karbarran, pero muy alejada de sus zonas de influencia. Al parecer esta roca nunca tuvo nada de interés para ninguno de ellos.” 
-“Muy bien. Exedore, necesito convocar una reunión con el estado mayor, el comando de control de datos y la dirección de telecomunicaciones de la alcaldía. Los analistas deben estar ya rastreando todos los archivos procedentes del enemigo.” 
Luego de esto salió del puente y se dirigió al conector, la enorme pieza que unía el crucero militar con la sección civil. Por estar entre ambas solía considerarse un terreno neutral entre el mando militar y el civil. Lo que le provocaba mas inquietud era la casi segura presencia de Miriya. Una hora después, ya estaban en una sala del conector habilitada para reuniones. Todavía conservaba un aspecto como de galpón. Data, del comando de control de datos dice: 
-“Ya han sido rastreados y eliminados el 83.5% de los virus y archivos dañinos del enemigo. Se están reconstruyendo los cortafuegos y se incrementaron los protocolos de seguridad. Será necesario suspender la operación de todos los dispositivos de conexión intracraneal hasta que podamos establecer un monitoreo permanente de señales neurodigitales. Ya se conocen los patrones generales de las distintas razas de la galaxia conocida, por lo que esto es factible.” 
Esto generó un murmullo entre todos los asistentes, pero Max intervino en ese momento: 
-“En estos momentos vamos a requerir la colaboración de todos. Necesito que la red de datos quede bajo vigilancia de nuestros analistas, pues tenemos indicios de que hay un terrorista informático infiltrado en Ciudad 7. Al parecer estaría colaborando con el enemigo, por lo que se requerirá restringir todo el tráfico de datos. Además, necesitamos escanear los cerebros sospechosos con urgencia. No hay tiempo para esperar autorización de algún tribunal.” 
Ante eso, Miriya protestó: 
-“¡Eso es ilegal! ¿Acaso está declarando ley marcial para el uso de la red?” 
-“Alcaldesa, entienda que estamos en una situación de guerra, con un enemigo extremadamente astuto, que ha tratado de manipular nuestras comunicaciones a todo nivel. Como ya le indiqué, tenemos claros indicios de una infiltración en la nave; de hecho, casi todos los ataques enemigos han sido precedidos de un intento de intrusión en nuestra red.” 
Miriya, ahora que estaba en una sociedad civil, no quería renunciar a los derechos y costumbres de le gente civilizada, cuando la mayor parte de su vida vivió privado de estos. Respondió:  
-”Pero ni siquiera una situación tan crítica justifica el control total de los ciudadanos.” 
-“Alcaldesa—no sabía si decirle señorita o señora, pues temía una reacción violenta—tenga en cuenta las extrañas circunstancias de este enfrentamiento. El primer ataque enemigo fue detenido abruptamente, y según nuestros últimos informes, fue por la intervención de Bassara Nekki, un hacker equipado con todo tipo de consolas y conexiones cibernéticas, instaladas a bordo de un prototipo variable modificado. El 2º ataque sólo fue un señuelo para tomar el nodo de datos. Además, las redes informáticas han registrado gran cantidad de ataques, el mas devastador de los cuales fue justo antes de la última batalla, y aún estamos reparando sus daños. Necesitamos a expertos en informática, aquí y ahora.” 
Hasta ese momento el doctor Hassler, un reputado neurosiquiatra, había estado callado. Cuando Miriya le indicó, dijo: 
-“Señores, me temo que les tengo noticias aún mas graves. Hemos registrado reacciones extrañas y alteraciones de personalidad en algunas personas, señales alteradas en forma permanente, como si les hubiesen seccionado neuronas en el área de broca.” 
Max, muy intrigado, preguntó: 
-“¿Pero no se supone que usamos los protocolos de conexión intracraneal más seguros?” 
Hassler le dijo, con una voz muy ronca que venía bien con su grueso cuerpo: 
-“Eso es precisamente lo mas extraño. Muchos de los afectados no tienen conexiones cibernéticas de ningún tipo pero, eso sí, ocupan puestos clave en la gestión de redes.” 
-“Eso significa...” 
-“Significa que de nada servirá controlar cada archivo, paquete o bit que los ciudadanos muevan por la red, si el supuesto enemigo no la necesita. Señor Sterling, necesitamos otro enfoque, uno a mas largo plazo” 
Miriya terció, diciendo: 
-“Almirante Sterling, ¿Usted cree, realmente cree que los ciudadanos se van a someter a un control así? Recuerde que la gran mayoría viene huyendo del asfixiante núcleo central de la ONU, donde las libertades civiles están cada vez mas restringidas...” 
Sterling, que hasta cierto grado simpatizaba con la oposición a la ONU, aún cuando trataba de ocultarlo, le respondió: 
-“Entiendo muy bien lo que quiere decir, señor. Pero dado que ellos, me refiero tanto a los barautas como los crackers infiltrados y que al parecer están colaborando atacaron sin provocación, creo que nuestra única posibilidad es vencerlos antes de negociar 
Miriya entonces le dijo: 
-“¿Y por que no tratar de comunicarse con ellos? Después de todo la 1ª guerra robotech ocurrió en gran medida por falta de comunicación.” 
Max le respondió con algo de sorna: 
-“Toda la historia reciente de este sector de la galaxia ha sido una cruel comedia de equivocaciones. Pero incluso en esas circunstancias, fue la UN Spacy la que contuvo la situación el tiempo suficiente para finalmente sentarse a negociar. Ahora es lo mismo. Necesitamos contener y vencer a los barauta hasta que estén dispuestos a negociar.” 
-“¿Arriesgando vidas civiles? ¿Acaso no puedes tu o Exedore ponerse en contacto con ese tal Enigma?” 
Exedore terció: 
-“Señora Sterling, créame que lo hemos intentado. Su líder no aparece en ninguna parte. No hay videos ni fotos de él, no hay un sólo registro de su voz, y al parecer, todo lo hace por intermediarios. Otros son la cara visible de su imperio. Ahora estamos procurando ponernos en contacto con otros mundos para ver como han enfrentado la situación.” 
Miriya se sintió algo molesta por la referencia a su ex, allí presente, pero le tenía cariño a su ex compañero de armas, por lo que le respondió con tranquilidad: 
-“Muy bien. Lo intentaré. Pero necesito garantías de que no contactarán a la ONU hasta que quede esto resuelto.” 
-“Por supuesto. Aquí nadie espera con ansias que la ONU intervenga, y menos la Policía Militar Gloval.” 
Data prosiguió entonces: 
-“Tendremos que usar antivirus inteligentes para vigilar y depurar completamente la red civil. Además los que tengan una conexión intracraneal deberán estar presentes para un análisis completo.” 
Miriya le respondió: 
-“Haré lo que pueda, pero no puedo pasar por encima de sus derechos.” 
Al terminar la reunión, Max se acerca a Miriya y le dice: 
-“Disculpa por lo que dijo Exedore. No se por que lo hizo.” 
-“No tiene importancia.” 
Después, casi en un susurro, Miriya le dice a Max: 
-“Ten mucho cuidado. Esto es mucho más peligroso de lo que parece. Me siento...” 
Max la mira muy extrañado. Ella no le hablaba así, con esa calidez y esa ternura hace años. Miriya continuó: 
-“...como una marioneta, igual que cuando estábamos bajo los Maestros de la Robotecnia...” 
 
III 
 
Han pasado unas semanas desde el último repliegue. No hay señal alguna de los barauta ni de la UN Spacy. Las naves parecieran estar totalmente aisladas en el universo, y los servidores y relés de las naves rastreaban el hiperespacio en busca de señales de la red de datos de la ONU, en modo pasivo para no hacerse visibles. Mientras, casi todos los colonos volvían a su vida normal. Miriya estaba en su despacho en la alcaldía y tenía varias preocupaciones. Una de ellas era la propuesta de escanear no sólo la red, sino cada computador e incluso cada cerebro con conexión cibernética a bordo de la flota. Hassler le comentó las extrañas distorsiones en los cerebros de la gran mayoría de los operadores de red, sobretodo los militares. Le molestaba que casi todos los procesadores cuánticos modernos dependieran de una arquitectura heredada, como tantas cosas, de los Maestros de la Robotecnia.  
Durante la época en que los Zentraedi estaban bajo su control, entrenaban a menudo en entornos virtuales. En ellos, los Zentraedi o las Meltran estaban siempre en inferioridad numérica y se estimulaba su agresividad. Mas tarde supo que la población clon de Tirol eran controlados por una red similar, rastreando toda idea individual para depurarla de la mente del sujeto antes de matarlo. Cuando la ONU avanzó por las ruinas del imperio tiresiano, absorbieron toda la tecnología informática y espacial de ellos, computadores cuánticos, memorias biofotónicas, anuladores de gravedad, etc., y todo en base a la protocultura, esa energía bioetérea que tantas ambiciones despertaba... 
Ahora estaba ocurriendo lo que interpretaba como una consecuencia de ello. Esa tecnología, como siempre estaba creando una sociedad totalmente dependiente de esta, un instrumente ideal para esclavizar, y eso inevitablemente generaba resistencia. Realmente, si los barauta hubiesen negociado en vez de atacar, no habrían resultado un mal aliado contra el consejo de seguridad de la ONU. Pero al parecer necesitaban la protocultura con desesperación... 
Fuera de todo esto, también le preocupaba Mylene. Ella no pudo evitar que se fuera de la casa y ahora tenía otra vida como parte de una banda. Se sentía inepta como madre por que no entendía los cambios que estaba atravesando su hija. Repentinamente estaba jovial, casi eufórica, y al minuto siguiente estaba enfurruñada o, como ocurría mas recientemente, triste sin motivo aparente. Si tan sólo hubiese tenido madre... pero ella había sido clonada y cultivada por los Maestros de la Robotecnia, por lo que no tenía la menor referencia. 
Lo más curioso es que uno de los integrantes de la banda que integraba, Bassara Nekki era además un astuto hacker. De hecho, según los informes que Max le hizo llegar, fue él quien entró en los sistemas enemigos y logró detener el primer ataque, superando incluso alo Haydonitas y Spherisianos del comando de control de datos. Si era cierto, y ella lo sabía con seguridad, eso le podía dar una baza que juarle a max y no la iba a dejar pasar... 
Ahora Miriya esperaba a ambos. Cuando llegaron, hizo pasar primero a Bassara. Una vez adentro ella le dijo: 
-“Bassara, tu eres uno de los mejores hackers en la galaxia. Hasta ahora has trabajado con nosotros de manera extraoficial y por encargo. Ni el doctor Chiba, ni Data, ni yo podemos reconocer nuestro nexo contigo”  
-“Ya sé que me va a decir que lo que hago figura como ilegal...” 
-“no me interrumpas... 
-“Oiga, ¿Usted cree que puede darnos órdenes?. Esto no es el ejército. Somos ciudadanos libres, tenemos derechos... 
-“No te estoy pidiendo que ingreses en el ejército. Sólo te estoy pidiendo que prestes un servicio, digamos, paralelo al combate, un servicio no militar.” 
-“Quizás no sea militar en sentido clásico, pero estaría colaborando en la guerra, y eso es algo que nadie me va a obligar a hacer.” 
-“¿Quieres que la guerra termine luego?, pues lo podemos lograr si tú colaboras. Bassara—dijo bajando el tono de voz—la situación es mucho mas compleja de lo que crees. El doctor Hassler me ha dicho que ha encontrado rastros de alteraciones neuronales en los cerebros de varias personas, todos importantes en la gestión de redes..” 
-“Eso lo dijo durante la reunión cívico-militar...” 
-“Sí, pero ahora encontró mas datos. Ahora está casi seguro de que están infiltrando esas mentes. En lo personal, no creo que nadie disponga de tecnología tan avanzada como para hacerlo sin conexiones cibernéticas de algún tipo, pero de todos modos hay que estar atentos. De hecho—y al decir eso pulsó un botón azul en una placa cromada sobre su escritorio, con lo que desconectó la grabación—Hassler me dijo que uno de los afectados es Max Sterling. En realidad creo que deberían vigilarlo El ha cambiado, estuve años casada con él y lo conozco demasiado bien como para no darme cuenta” 
-“¿En que ha notado el cambio?” 
-“es algo demasiado sutil para definirlo, pero se que existe. ¿Tienes la posibilidad de escanear mentes?” 
-“Sólo si están conectadas a la red.” 
-Muy bien. A cambio, podemos borrar tu historial para que no te afecte en el futuro. Una vez terminada la crisis podrás establecerte donde quieras...y podrás conservar tu Varitech. Y..., recuerda, esta conversación no tuvo lugar y jamás me has visto en persona.” 
-“Wow. Suena interesante.” 
Una vez que él salió, hizo pasar a su hija. Esta le dijo sin mas preámbulo: 
-“¿Fue idea tuya eso de que saliera con Gamurin, o fue idea de papá?” 
-“Mira hija, fue efectivamente idea de tu papá. Yo no me opongo a que hagas música y no creo que tu vida vaya a ser un desastre sólo por ello. Pero tú sabes como es tu papá. El sólo estuvo de acuerdo en que siguieras con la banda a cambio de que accedieras a salir con ese piloto.” 
-“¿Pero por qué? ¿Acaso no vio lo que pasó con mis hermanas, las que ingresaron al ejército? Ni siquiera pude conocer a Dina. Y yo no quise entrar a ese mundo por lo mismo.” 
-“Mylene, eso es algo demasiado delicado, nunca he podido hablar con tu papá de ello. Volviendo al tema, creo que es mejor que salgas con él por ahora. Ni él ni yo te estamos pidiendo que te cases con el...” 
-“Aún. Pero se le nota en los ojos a ese tipo que ya tiene fija la idea de casarse conmigo, y es tan tonto...” 
-“Se que es un poco atolondrado, pero es un buen muchacho.” 
-“Está bien, saldré con él, pero tienes que prometerme una cosa: no me obligarás a casarme con él si me aburre demasiado.” 
-“Está bien hija, quédate tranquila. Y, por cierto, a mi me encanta que cantes. No lo dejes por nada del mundo y...” 
Mylene mira con sorpresa a su madre, mientras ella continuaba: 
-“Cuenta con todo mi apoyo en tu carrera. Yo sé que tu papá piensa que todos los artistas son borrachos y drogadictos, pero yo sé que tu no tienes porqué hacer lo mismo. Después de todo, fue una artista la que le mostró a mi raza mostró el camino de la cultura, que tan brutalmente nos negaron los Maestros de la Robotecnia, cuando...” 
De un salto, Mylene se abalanzó sobre su madre y le dio un enorme abrazo y un beso, exclamando: 
-“¡¡Gracias, mamá!!” 
Miriya miró con ternura a su hija. Y, cosa extraña, esa ternura le daba una calidez especial, y sentía que todos los problemas de la alcaldía y con los militares (léase con Max) se hacían mas fáciles de sobrellevar. 
 
IV 
 
Horas después, en un restaurante de comida china se veía a un joven impecablemente vestido con un terno Armani color gris claro, que observaba su reloj Edox de reojo. Pese a que había llegado con 5 minutos de adelanto, consultaba a cada momento su reloj y empezó a pasearse de un lado a otro, notándose en su paso marcial que era soldado. Gamurin se sentía muy nervioso. Ahora estaba de franco, mientras que Mylene tuvo un alto en los ensayos. Mylene se sentía nerviosa pero en un sentido distinto. Se dio ánimo pensando en lo positivo de la situación. A muchas chicas les impresionaban los tipos de uniforme por lo que se iban a morir de envidia. E igualmente llamaría la atención de los chicos. A sus 14 años soñaba con su príncipe azul pero quería conocer mas chicos, más mundo y divertirse más antes de ello 
Cuando llega Mylene, a la hora acordada, Gamurin le dice: 
-“Hola, que hermosa te ves. ¿qué te gustaría cenar?” 
-“Algo exótico. Me gusta probar sabores nuevos.” 
Mylene se siente un poco incómoda, ya que en realidad no iba vestida para un restaurante tan elegante. En el restaurante tenían un suave fondo musical con los clásicos de Bowie Grant. Al fondo, algunos hacían chistes sobre la virilidad de los Tiresianos. Kizaki le acomoda el asiento a Mylene y luego pide la carta. Tras recibir sus pedidos, Mylene le dice a Kizaki: 
-“¿Qué te pasa? Te ves algo cansado.” 
-“Es la tensión Mylene. Es extraño, pero en todos los combates siento una angustia, una tensión inexplicable.” 
-“Me imagino que para cualquiera debe ser difícil enfrentar una batalla.” 
-“Sí, pero esto es diferente, por que eso me provoca un sopor, una laxitud increíble. He estado a punto de ser derribado por lo mismo.” 
-“¿Y eres el único al que le pasa eso? He oído rumores...” 
-“Esto es confidencial. Entre nosotros, te diré que todos los pilotos han sido afectados y algunos ya están con depresión y no peden ser enviados al combate por lo mismo.” 
-“Es muy extraño. Bassara me dijo que había visto un comportamiento extraño en la red. Incluso el otro día, en chat gráfico con nuestros fans, me dijo que una de ellas tenía una distorsión en su señal emocional. En todo caso era una chica bastante rara, con un vestidito y un ramo de flores, todo muy cursi, sin onda. Fue justo antes del repliegue, y después él quedó atrapado en la red. No podía salir.” 
Al oír ese nombre, Gamurin se atragantó un poco. Mylene, haciéndose la inocente, le dijo: 
-“Es que Bassara tiene implantada una conexión intracraneal. No podía salir de allí como un, que sencillamente se arranca el casco. Además el suele correr riesgos.” 
-“En cualquier caso te informo que hubo una intrusión interna, y que la distorsión en la red fue deliberada...” 
-“¿¡Deliberada? ¿Es decir que alguien alteró intencionalmente la red justo antes del ataque barauta?” 
-“Si. De hecho tuvimos que usar todas nuestras armas digitales al máximo. Ahora estamos pidiendo ley marcial para la red. Pero además, desde entonces he dormido cada vez peor, y lo mismo le pasa a muchos pilotos. Lo mas preocupante es que muchos acusan la tensión y no los podemos enviar a combate por que tienen una auténtica depresión.” 
-“¿Depresión? ¿Pero no se supone que ustedes están entrenados para la guerra? ¿No deberían ser capaces de resistir la tensión?” 
-“Incluso en una guerra normal, Mylene, se producen depresiones y trastornos emocionales. Y entre nos, te digo que esta no es una guerra normal.” 
-“¿Por qué?” 
-“Por que deberíamos haberlos derrotado y no lo hemos hecho. El enemigo es inferior en número, en tecnología, en estrategia, pero aún así no los vencemos.” 
-“Pues yo he visto que los han vencido. Salvo la última.” 
-“En realidad, ninguna concluyó normalmente. En la 1ª el enemigo tuvo una falla computacional y en la 2ª, se retiró por su propia cuenta. Además, al parecer infiltraron un pirata informático bastante hábil que nos está atacando desde adentro.” 
 
Mylene quedó preocupada. No le gustaba el cariz que estaban tomando los asuntos. Si alguien en Ciudad 7 lograba ingresar a los sitios de red del ejército y tomaba control de sus computadores, la Colonia quedaría prácticamente indefensa. Y si el hacking que hacía tenía algo que ver con la debacle emocional de los pilotos, como empezaba a sospechar, estarían casi derrotados. Para tranquilizarse cambió de tema: 
-“¿Y que te relaja? Me imagino que debes tener alguna afición” 
-“Volar. Es mi pasión. Cuando vuelo, me siento otro; pleno de energía y vigor. ¿Y a ti que te relaja?” 
-“A mí me gusta cantar. Cuando lo hago todo se siente simplemente natural, todo se ve tan lindo...” 
-“Wow. Parece que en eso reside la vida. Encontrar aquello que nos hace sentir plenos, es más, creo que es ahí cuando uno encuentra su misión en la vida. Volar...” 
-“¿y por que no vuelas ahora? ¿Acaso tiene prohibido volar fuera de una misión?” 
-“No, pero los vuelos están controlados. Además todos los Nightmare de la flota están en taller para incorporarles los campos dimensionales sombra. Aunque pensándolo bien..., un amigo me pidió hacerle un vuelo de prueba a su Thunderbolt, que recién repararon. ¿Me acompañarías a volar?” 
La invitación tomó por sorpresa a Mylene. Nunca le atrajo la vida militar, probablemente por haber perdido contacto con sus 6 hermanas. Sin embargo, le gustaba viajar por el espacio y ver las estrellas. Además, volar en un caza variable le podía dar status (¡). Con cierta inquietud le contestó: 
-“Pero yo no sé volar. No tengo idea de eso. No te sería mas que un estorbo.” 
-“De ningún modo. Ven, vamos.” 
Contenta en el fondo, Mylene acompañó a Gamurin hasta su auto, un convertible francés y recorrieron la ruta que atravesaba el conector, llegando hasta la nave de batalla. Mylene tomaba esto como un reconocimiento a su adultez (¡ja!), y, con los ojos cerrados ondeaba al viento su rubia cabellera (dejo las tinturas extravagantes para los conciertos). Por su parte, Kizaki estaba seguro de que Mylene se iba a encandilar con el paseo. El sabía que Mynmei quedó prendada de Rick Hunter cuando volaron por los anillos de Saturno. Claro, después Rick se casó con Lisa y Mynmei con Rem, un clon de Zor, pero tenía claro que parte del precedente aplicaba a él. Ambos, con una sonrisa nerviosa, llegaron al hangar, y una vez allí, Blake los vio. Le dijo a Kizaki: 
-“¿No crees que es muy feo hacer esto con una niña de 14 años?”  
Kizaki se enfadó y le dijo: 
-“Yo tengo 18, así que la diferencia es mínima. ¿Es una excusa para tu envidia por que soy mas joven que tú y aún así mando sobre ti?.” 
Blake lo miró con desprecio. Mylene, por su parte, sintió ganas de sacarle la lengua. Después de esto abordaron la nave, un VF-11 Thunderbolt biplaza, en color celeste con líneas rojas. Tras acomodarse en la catapulta, despegaron en modo caza y cuando estaban a varias millas de la nave, Mylene exclamó: 
-“Es bellísimo. Casi mejor que en la red.” 
-“Es mejor por que es real. Esta es una de las máquinas mas finas que se han construido. De hecho es casi tan fácil de pilotear como un VT Logan.” 
Continuaron volando, mientras Kizaki le enseñaba a la chica Sterling todo lo referente al vuelo, con verdadera pasión. Ella por su parte lo escuchaba absorta, poniendo cara de mucha atención (se veían por las pantallas de radar) a pesar de que no entendía ni la mitad de lo que le explicaba Gamurin. Se dirigieron a un sector donde estaban haciendo prácticas. Se veían escuadrones de Lightning III, Alfa-Betas y Logans, Solicitando permiso para acompañarlos en el entrenamiento. Modificó los programas del caza para que nadie viera quién lo acompañaba. 
 
De pronto, de la nada aparecieron 5 cruceros barauta, uno de los cuales era del tipo de gran tamaño y color blanco. Kizaki inmediatamente llamó al crucero: 
-“Nave Battle 7, aquí líder Emerald en vuelo de prueba. 5 cruceros enemigos.” 
-“Aquí control. Tome el mando de los cadetes y asegúrese de traerlos a la nave. Le enviaremos refuerzos.” 
-“Entendido.” 
Aceleró violentamente su nave. Por desgracia, sólo estaba ligeramente armado. Avistó a unos escuadrones en práctica, cuyos VT Logan de entrenamiento ya se dirigían al encuentro del enemigo. Fue sobrepasado por 3 “99s” y 2 docenas de “109s”, mientras veía como uno de las fragatas pequeñas apuntaba sus cañones hacia la flota. Inmediatamente se dirigió acompañado de 3 Logans hacia la parte trasera de la nave y cuando estuvo cerca se deslizó sobre ella como un patinador, evitando salir despedido con los cohetes de maniobra espacial. Logró ametrallar uno de los cañones pero cuando iba por el 2° salió otra ola de ataque. Mylene le gritó: 
-“Vienen 4 hacia acá, por tu derecha.” 
-“Gracias. Vigila los indicadores de estado” 
-“Esta bien, pero no entiendo mucho de esto...” 
-“Solo avísame si ves algo raro” 
Kizaki se sentía inquieto por llevar como copiloto a una civil sin experiencia, pero justo en ese instante un virus anuló su sistema de control de tiro. Echando maldiciones le dijo a Mylene que hiciese una transferencia de datos a su cabina. El enemigo se acercaba cada vez más. Mylene sólo dijo: —“Que raro escucharte hablar así”—tras lo cual tomo el mando del battloide y disparó por instinto a los 4 enemigos, derribando a 3 de ellos, pero el 4° activó su foco de absorción de protocultura, dejando inutilizado su battloide. Gamurin sintió un sopor y una angustia inexplicable, una indefinible sensación que había afectado a todos los pilotos en las batallas contra los barauta y que en algunos casos se estaba haciendo permanente. Lo mas extraño es que Mylene sólo sintió parcialmente el sopor típico que acompañaba a esta maniobra.  
Cuando habían capturado a algunos pilotos de la flota, el enemigo emprendió la retirada, finalizando el ataque con una transposición. 

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