Fanfic Name / Nombre del Fanfic: La rosa roja

Chapter / Capitulo: 16

Author / Autor: Alexander Zeitzler

Rating / Clasificacion: AP (All People = Todo espectador)

Romance

Fanfic: -Los preparativos para el viaje del SDF-3 están a punto de concluir-dijo Arturo Pérez-reverte a la asistente de Sue- de hecho, la almirante visitará el hospital sólo para anunciar allí el ataque. 
 
-¿Porque desde el hospital? 
 
-Es la vieja tradición de Churchill en la época de los bombardeos: elegir el lugar de máximo sufrimiento como el más adecuado para dar las noticias. 
 
-¿Y usted cree que se presentará? 
 
-Sí. Por eso estoy aquí.  
 
 
 
 
 
Los niños viajaban de una cama a otra visitando a sus padres. Algunos se recuperaban del último ataque de Khayron. Otros visitaban a los últimos heridos. El hospital se había convertido en parte en hospicio para los huérfanos que habían perdido a sus padres desde las últimas batallas. El estado se hacía cargo de su destino, y Leonard había insistido que los huérfanos eran los cadetes ideales para el ejército de la cruz del sur.  
 
Sólo ellos, argumentaba, podían darle ese espíritu de fanatismo que él tanto esperaba inculcar a la nueva armada. "Los soldados modernos son un fracaso precisamente porque conocieron la paz; nunca le perdonaron al ejército esta guerra; eso los hace pelear con una amargura y un fatalismo que impide que su corazón este en la victoria: los soldados del futuro son los huérfanos; los que nacieron con la guerra; los que no tienen más familia que sus camaradas; los que perdieron a sus padres y encontraron en la armada a su única familia; los que no tienen a quién culpar de esta guerra, porque la conocieron desde siempre; ellos serán mejores que los Zentraedis; para ellos sólo el más fuerte sobrevive y si no, tu destino es la muerte. Ellos tendrán exactamente la virtud que les falta a sus padres: no harán jamás preguntas".  
 
En armonía con esta filosofía, los niños huérfanos solían vivir y literalmente crecer en los bellos jardines que en principio se habían construido para el descanso de los pacientes.  
 
Y eso se alentaba adrede; "Ellos no deben temer la vista de los heridos" insistía Leonard: "Por el contrario, deben acostumbrarse desde antes de tener uso de razón a ese espectáculo de ver a los soldados caídos en combate; luego, para ellos eso será el destino natural de un soldado. Deben aprender que el soldado no es nada por sí solo. El individuo es el enemigo de la especie: sólo el sacrificio del individuo puede garantizar la supervivencia de la especie".  
 
"Eso nunca lo han aceptado sus padres, pero sus padres ahora están muertos, y literalmente jugando sobre sus tumbas condecoradas con las medallas que ganaron, puestas sobre sus lápidas, sus hijos aprenderán a aceptar la muerte del individuo como única alternativa para salvar la especie humana; el día que eso sea lo más natural para ellos, (¡ah, ese día!) mi obra podrá empezar: dadme un ejército forjado en la renuncia a la vida como única alternativa para salvar vidas, y yo os daré la victoria, la victoria contra los Maestros de la Robotechnia, contra QUIEN SEA; NO HAY ENEMIGO AL QUE UN EJERCITO ASI PUEDA DERROTAR. Dadme estas tropas y seré invencible". 
 
Lisa escuchaba las peroratas de Leonard mientras paseaba por los jardines del hospital acompañada de Exedor Edwars y Riber. 
 
-Es un espectáculo muy alegre escuchar a los niños reír entre los verdes patios-decía Riber- juegan como si nunca hubiera habido una guerra. Es una suerte que por lo menos alguien se haga cargo de ellos. 
 
-Nadie se hace cago de ellos-decía Leonard con ojos de iluminado-son ellos los que hacen cargo de todo. 
 
-Elegante frase; desusada en usted-dijo Exedor con ironía. 
 
-Verdad pura y simple-retrucó Edwards-esos no son niños; son la semilla de una nueva generación de soldados; soldados que nunca dudarán, como lo hicieron sus padres; y nunca dudarán porque es preciso ir a buscar entre los que nunca conocieron la paz a los soldados perfectos: sólo ellos aceptarán la muerte sin vacilar, sin preguntas, sin retroceder jamás; de estos chicos se hace cargo de el ejército de la cruz del sur, simplemente con crecer aquí; en cuanto ellos, los huérfanos de la guerra empuñen la espada, lograrán lo que sus padres jamás lograron... 
 
-¿Qué?-preguntó Lisa secamente. 
 
-La obediencia ciega: no retrocederán jamás. 
 
-¿Eso no le parece simplemente suicida?-pregunto Exedor-se lo pregunto como Zentraedi... 
 
-Los Zentraedis no fueron derrotados por eso, sino por olvidarse de eso; si usted mismo y Breetai hubieran obedecido las órdenes de Dolza nos habrían acabado. 
 
Edwars río entre dientes.  
 
-No estoy de acuerdo con su romántica concepción de la guerra, Leonard. ¿Olvida usted el gran cañón? ¡Por Dios que me molestan esas palabrerías idealizadas de la guerra! La guerra siempre la gana el más fuerte, siempre se impone la fuerza de las armas; es sólo que hay muchas maneras de ser el más fuerte; muchas armas, el canto de Minmei fue de hecho eso: un arma. Todo es cuestión de saber cuál utilizar y cuando.  
 
-Y usted que piensa-dijo Lisa volviéndose hacia Riber-no he oído su opinión. 
 
-La verdadera fórmula de la victoria es muy sencilla. No poder nunca retroceder. 
 
-Eso no es muy revelador, oficial. 
 
-Regresé del infierno, después de soportar fuegos que hubieran derretido los blindajes más recios; y oí a los heridos pelear con los médicos porque quería regresar al frente; gritaban que ellos no se iban; que no abandonaban a sus camaradas; escuché a los que ya se consideraban muertos en vida antes del último combate que jamás se rendirían. No poder retroceder es todo en el combate: y no es lo que les deseo ni a los huérfanos ni a los hijos de los que combatieron. Pero también entiendo lo que dice Leonard: para ellos es algo natural. No flaquearán. Tal vez ese espíritu sea capaz de hacerlos mejores soldados de lo que fueron sus padres.  
 
-Me alegro que lo apruebe. 
 
-Yo no lo apruebo, Leonard. Lo comprendo. 
 
-Es suficiente por hoy-dijo Exedor cansinamente-si me permite almirante, quisiera discutir ciertos detalles sobre la defensa de la tierra con Edwars y el general Leonard. 
 
-Por supuesto, Exedor. Lo dejo en sus manos. 
 
Los tres hombres se alejaron, caminando por los senderitos de pedregullo cortados a pido entre el césped. Ofrecían un curioso contraste; el pequeño Zentraedi, el gordo Leonard, y el espigado Edwars. Gesticulaban animadamente mientras trataban de ponerse de acuerdo de algún modo, y en el intento ya se perdían en los recodos del patio. 
 
-¿No te gustaría quedarte entre ellos, Riber? He estado pensado mucho en tu caso y creo que sería lo mejor para ellos que te nombrara instructor de las tropas de la Cruz Del Sur. 
 
-Tardarán mucho en estar listas. Y necesitan a un jefe menos anticuado que yo. 
 
-Tú eres el hombre que quiero para ellos-Lisa se recostó en la barandilla del patio mientras contemplaba la magnífica vista a su alrededor-conoces para que estamos peleando, y como regresar: eso no es fácil combinarlo. No quiero que el ejército de la cruz del sur piense sólo en ganar batallas: quiero a alguien que les enseñe a sobrevivir a las retiradas; cualquiera puede morir por la victoria, pero sólo los que logras regresar pueden enseñarle cómo sobrevivir en una retirada. Y quiero que tengan a su lado a alguien que les pueda decir que sentido tiene esta lucha cuando tengan que convertirla en realidad...quiero que tengan a alguien como tú a su lado entonces, Karl. 
 
-¿Quieres que yo este con ellos, o quieres tenerme a salvo lejos del combate? 
 
-No hablemos de eso, Karl. 
 
-Ya sabes mi respuesta; no me quedaré aquí sembrando semillas de soldados; no quiero que estos chicos tengan que conocer otra guerra. Y la única forma de evitarlo es que la misión del SDF-3 tenga éxito. Tú lo sabes y yo también. Y no quiero estar lejos cuando eso pase. 
 
 
 
 
 
 
-Bueno, muchachos, vamos a trabajar-dijo Maguire cuando llegó a la los sets- listos para rodar. Como verá, oficial Hunter, nos tomamos muy en serio la escenografía. Los Zentraedis que colaboran con nosotros tienen su propio tamaño... 
 
-Hay muchos que lo conservaron-dijo Rick- me alegra que colaboren con usted. 
 
"Pero tú no te me pareces en nada, chico, y además no creo que tengas los reflejos lo bastante rápidos como para parecerle un piloto de verdad a nadie". No pudo menos de pensar. 
 
-El mayor mérito es de la RDF que nos han prestado los Varitechs para el trabajo. Vamos a filmar el ataque de Khayron por sorpresa, ya sabe, esa noche que nos robaron la protocultura. 
 
-Nuestra propia protocultura; sí, la usaron luego para atacarnos. Vaya que me acuerdo. 
 
-Lo malo de la películas bélicas es que son demasiado maniqueas-dijo Maguire- siempre los buenos son muy buenos, y los malos además de ser malísimos son tontorrones encima. Nadie se va a creer que los Zentraedis eran un montón de bobos con uniforme. Tenemos que retratar los méritos de su cuartel general, si queremos darle realismo a esto. 
 
-Hará bien. Muchas veces nos superaron en astucia... y en valentía también. 
 
-Bueno, venga que empezamos. 
 
Los Zentraedis saltaron del océano a brincos contra las bases industriales sorprendiendo a los obreros y llenando de golpe y porrazo todo el panorama; era exactamente igual que como pasó, reconoció Rick un poco a regañadientes. 
 
-¿Tienen que usar las naves Zentraedis? Yo creía que era más barato usar efectos especiales de digital... 
 
-¿Pero no ve que tenemos que hacer un documental pre-estreno sobre "cómo se rodó la peli"? Hay que hacer por lo menos UNA escena sin el digital. Si no, no tenemos nada que contar... 
 
-Ya veo, ya. 
 
 
-LOS MICRONIANOS ESTAN MEJOR PREPARADOS DE LO QUE PENSE... 
 
 
La voz retumbó en los oídos de Rick como una pesadilla demasiado bien conocida, miró alrededor, pero no vio ningunos altavoces... 
 
Y los Varitchs volaban exactamente hacia él... 
 
-¡AL FIN! 
 
Y Rick oyó el inconfundible ruido de los lásers DE VERDAD. 
 
 
-SIN EMBARGO NO ESTAN A MI ALTURA TODAVIA. 
 
El inconfundible rostro se volvió hacia él, mientras el Varitech caía en picado EXACTAMENTE en el encuadre superior izquierdo del panorama. 
 
-¡¡¡Pero bueno, hombre!!! ¿¿¿Es que están locos??? ¡¡¡ESE ES KHAYRON, PEDAZOS DE IDIOTAS: HAN CLONADO A KHAYRON!!! 
 
Ya iba a disparar la pistola de rayos al ojo del mounstro cuando Maguire le demostró que parecido flojo o no, no andaba tan mal de reflejos al fin y al cabo, porque le bajo el arma de un manotazo. 
 
-¡No es Khayron! Es Heath Ledger; lo he contratado para hacer de Khayron por el parecido que le noté con él después de hacer de Guasón en Batman... 
 
-Pe-pe-pero bueno, hombre, ¿Es que tenía que agrandarlo a tamaño Zentraedi? 
 
-Pues claro, las cápsulas se agrandamiento pueden reducir a los Zentraedis a tamaño humano, pero también agrandar a los humanos. Ya le dije que no podemos usar siempre el digital. 
 
-Hola muchachos-dijo Heath acercándose a ellos- "¿Por que tan serios?" ¿No les gusta la escena? 
 
-Le has dado un susto de muerte al oficial Hunter-dijo Maguire- a ver si te dejas eso aires de divo, chico: estoy tratando de convencerlo de que nos dé unos equipos más para la utilería del rodaje, y casi te deja tuerto. Vamos, a trabajar, a trabajar. 
 
Rick se paso un pañuelo con mano temblorosa por la sudorosa frente; "Yo ya no estoy para estos trotes" pensó a su pesar. Recordó cuando vio a Khayron por última vez, y trago saliva sólo de pensarlo. 
 
-Vamos, vamos, que no ha sido nada-Y encima el tipo aquél estaba dándole palmaditas en la espalda- lo realmente bueno serán las escenas de la batalla contra la flota principal; allí si que vamos a usar ordenadores; no puede ser de otro modo claro; no vamos a poner 4.000.000 de naves de verdad. 
 
-No, supongo que no. ¿Y que ha pensado del argumento?  
 
-OH, bueno, pienso seguir la receta de Mille: "empieza con un terremoto y luego ve subiendo" Voy a comenzar con Global recibiendo la orden de atacar a los Zentraedis a su pesar indicando que no están preparados, ya sabe. 
 
-Desde el principio la batalla fue un infierno en constante improvisación-dijo Rick- y lo digo con todo conocimiento de causa, porque yo mismo me vi metido en ella por accidente. Global ni siquiera sabía como se usaban exactamente las máquinas antigravedad del SDF-1 con el tragicómico resultado de que cuando las accionaron salieron disparadas de la nave en vez de elevarla... y el sistema de transporte hiperespacial nos llevó junto con los Zentraedis a Plutón.Eso fue lo único que al final nos salvó el pellejo, porque Breetai tardo lo suyo en seguirnos. Pero dejo la tierra indefensa. Si Breetai hubiera querido caer sobre la tierra nada lo hubiera impedido. Menos mal, dentro de lo malo, que nos persiguió a nosotros. Claro, todo eso lo sabemos ahora, pero en aquél entonces nadie sabía que Breetai quería la nave, no el planeta. 
 
-No hay nada mejor que un grupo de novatos que tienen que enfrentar en desventaja al mejor ejército de la galaxia. Al público le encantan los héroes en desventaja. 
 
-A mí no me hizo ni maldita la gracia cuando estuve allí...lo que no entiendo es que van a hacer ustedes con Khayron: es el hombre más odiado del mundo. Un personaje muy poco atractivo. 
 
-Rommel había sido un general muy odiado por sus enemigos también. ¿Sabe que el primer actor que lo encarnó fue un inglés: James Mason? Y no fue mucho después de terminada la guerra mundial: en los años 50. Si se sabe usar bien, un villano que realmente existió es mucho mejor que uno inventado. Y Heath es el único que puede darle ese toque humano que lo ponga como un ser real, no como un ogro come niños de los cuentos de hadas que nadie creería: yo quiero presentarlo como al más humano de los Zentraedis...  
 
-El más humano de los Zentraedis...eso no es nada halagador para los humanos, pero suena bien.-dijo Rick- tal vez sea la mejor manera de presentar a ese personaje, en efecto. Era uno de los mejores oficiales de la flota Zentraedi. 
 
-El trailer publicitario comenzará precisamente con el vídeo que Khayron le mando a Global cuando tenía (literalmente) a Minmei en sus garras: Ledger va sonar más maniático que en el Caballero oscuro cuando recite el parlamento que le tengo escrito con su temible voz:  
 
"Tengo en mis manos todo lo que ustedes los micronianos más aman, aquello con lo que destruyeron y masacraron a 4.000.000 de naves Zentraedis, almirante Global, y todo lo que tengo que hacer para dejarlos a ustedes desarmados e indefensos ante el hombre que más odian en el mundo es aplastarlo con un simple movimiento de mi dedo meñique..." 
 
¡Vamos hombre! Señor Hunter, no me negará que suena bien... 
 
-Demasiado... 
 
-Y Global respondiéndole que esta loco rodeado de sus fieles y condecorados oficiales, pálidos de asombro e incredulidad al ver a la insoportablemente débil y adorable Minmei entre las garras de semejante mounstro... 
 
-La magia del Cine... 
 
-De eso se trata: y la voz de Ledger: 
 
"Pero mi locura tiene un remedio almirante Global: va a darme usted lo que siempre le negó a Dolza, lo que no pudieron conseguir Exedor ni Breetai: va usted a poner en mis manos es SDF-1." 
 
"Y lo va a hacer porque un nuevo Señor de la Guerra ha llegado a su miserable planeta a imponer Su Ley: y ese soy yo." 
 
-Tiene usted a su Khayron. Sí; ya entiendo. 
 
-Después el trailer continuará con la voz en Off:  
 
"La más grande contienda jamás librada..." mientras las escenas de los Varitechs en lucha contra los Zentraedis con las nubes de estela de los proyectiles teleridigidos tejiendo sus siniestras telarañas de destrucción y muerte en todas las direcciones junto con los lásers detonando en línea recta... 
 
-El padre de Lisa siempre decía que todas las batallas siempre son bellas cuando las ves de lejos... 
 
-Eso formará parte de la estética del film. Bueno, pues le decía, entonces la voz en off continuará: 
 
"Los dos ejércitos más poderosos del mundo enfrentados en lucha mortal..." 
 
Y seguimos con unas tomas de el puente del SDF-1 con la global y Lisa y Claudia, súbitamente cortadas por un brutal primer plano de el rostro blindado de Breetai inundando la pantalla: girando lentamente sobre su hombro para preguntar con incredulidad: "¿Un motín?" a un Exedor siniestro que murmura sobre su oído las palabras "Esto nunca había ocurrido jamás en toda la historia de flota Zentraedi Milord".-Maguire abrió las dos manos delante de su cara, como si pudiera ver en su mente el grandioso recorrido de las escenas, su voz se hizo más vibrante, más emocionada, mientras que a Rick le corrían escalofríos por la espalda-y la voz en off recitará: "Dos culturas totalmente diferentes..." corte: un primer plano de una llorosa Miriya Parino arrodillada frente a su enemigo recitando conmovedoramente su parlamento: "La derrota es una desgracia que ningún zentraedi puede soportar: acaba con mi vida, microniano, y dame el honor de morir con valentía..." 
 
Corte: un MONSTRUOSO primer plano de el SDF-1 disparando el gran cañón contra los superacorazados de combate Zentraedis, que explotan espectacularmente con toda una sinfonía de música de fondo.  
 
Corte: Un primer plano de la colosal Sala del gobierno de la tierra unida con los funcionarios con sus inmaculados uniformes sentados en sus escritorios mientras la cámara se acerca en la figura de un astutísimo Exedor, en cuello y corbata, negociando ante ellos como embajador: 
 
"Para los Zentraedis la lucha es una forma de vida, toda nuestra historia es una sucesión de batalla tras batalla y gloria, PERO LA EXPOCISION A UNA SOCIEDAD LIBRE HACE QUE NUESTROS SOLDADOS SIMPLEMENTE SE NIEGUEN A PELEAR..."  
 
Corte: un primer plano de la boda de los Sterlings bailando al son de la música nupcial celebrando la unión entre una Zentraedi y un humano, alzando las copas en brindis, y girando alrededor de la pista, felices, mientras una bellísima nube de papel de confeti y serpentinas de colores caen sobre ellos.  
 
Corte: Un Breetai rígido, mirando desafiante a las estrellas, desde el puente de mando de su superacorazado estelar con las manos cruzadas a la espalda mientras toma la desición de enfrentarse a su propia flota, pensando las inolvidables palabras: "Escucha bien mi consejo, Dolza, y mírame bien mientras puedas, porque esta será la última pelea de Breetai".  
 
Y luego la voz en off recitando: "Un arma que nadie había concebido jamás utilizar..." mientras la cámara enfoca a una bellísima y super-sexy minmei, conmovedoramente inocente, y frágil cantando y bailando como nadie ante las ventanales de el SDF-1 que estallan en disparos, y Varitechs enfrentándose en duelo a muerte, mientras la voz de Minmey los dirige en medio de la batalla, luego un recorrido por los puentes de mando de la más supersofiticada tecnología de combate Zentraedi, llenos de oficiales desconcertados, dando órdenes contradictorias, con asustados asistentes corriendo caóticamente de un lado a otro justo antes de que los lásers micronianos los hagan estallar; el patético lamento de los heridos, la inútil lucha contra los paneles de mandos que estallan y los cables eléctricos que caen, el desconcierto, la desesperación, la impotencia ante la derrota, y en medio de todo ese pandemonio, un Khayron sangrando por un ojo, recitando el parlamento de su temible venganza:  
 
"Muy bien, ya se divirtieron, AHORA ES MI TURNO: VOY A EMBESTIR EL SDF-1" un apocalíptico primer plano del SDF-1 acercándose ante las pantallas de la nave de Khayron, en rumbo de ya inevitable colisión.  
 
Corte: un Varitech que lentamente asciende sobre su montacargas, lentamente iluminado por el sol; a bordo estoy yo, con el sol llenando la cabina, con la cabeza inclinada debajo del casco rojo a rayas blancas que me sirve de visera; mi rostro sereno mirando poco a poco al mismo nivel de los ojos del espectador: y justo entonces, la voz en Off: 
 
"ROBOTECH, LA PELICULA". 
 
Maguire rió. Rió, se veía que se divertía como un rey. 
 
-¿Tiene que hacer tantos cortes? ¿No le parece a usted que eso es acumular muchas escenas en un sólo trailer? Al final, ninguna estará completa, todas estarán nada más esbozadas... 
 
-¡Claro! De eso se trata: ¿Usted no ha visto nunca un trailer? Pues son todos iguales: ocultan más de lo que muestran, precisamente por cortar violentamente las escenas. Eso hace que el espectador se pregunte, cómo se relacionarán unas con otras, en la película completa. Así se siembra en la mente de el espectador la curiosidad por enterarse de más, el deseo de ver la película completa; al mismo tiempo se le dan las escenas más espectaculares sin explicación alguna, para que intuya el tono épico del film, para que sepa de antemano que va a ser todo un regalo para su retina, y de paso, se le indican los enigmas de la trama subyacente SIN EXPLICARSELOS, a fin de que el deseo de enterarse de el porqué de los mismos en la historia le pueda más, y así tome la decisión de ver la película: del trailer que logra despertar ese sentimiento en el espectador se dice que le "ha vendido" la película; y esa es precisamente su función... 
 
-Bueno, supongo que sí... 
 
-No lo suponga amigo mío: créalo. Así es este trabajo.  
 
-Pero, ¿Porque necesita cerrar el trailer con la imagen del Varitech subiendo por el montacargas iluminado por la luz del sol, con usted en la cabina? No entiendo qué significa ese primer plano de usted con el sol dándole en su hombro, ni porqué precisamente con la cabeza baja, levantándola poco a poco para mirar al espectador a los ojos al final... 
 
-Ese será el opening de la película cuando aparezcan los créditos de los actores y el director: esa escena implica precisamente la ascensión del piloto novato que termina por convertirse en un templado oficial de escuadrón. Primero la máquina, luego el hombre que la dirige, los dos en ascenso, y el sol para indicar que no es un hombre cualquiera, sino el iluminado, el que despierta dentro de sí las cualidades de líder que despiertan simpatía y confianza en el espectador, que le ganan su corazón: es importante que el héroe sea simpático, y si es un novato que va evolucionando hasta convertirse en un sereno líder de escuadrón, tanto mejor: eso le da gancho a la historia. Me dejo de llamar Tobey Maguire si cuando vean esa escena los fans no se dicen a sí mismos: "ESTO ES ROBOTECH: NO ME HAN ENGAÑADO, ESTOY VIENDO LA VERDADERA HISTORIA". Ese es el primer trabajo que tengo que hacer si quiero ganarme al público en sus butacas: hecho eso, lo demás es más fácil. 
 
-Pero si es una historia que ya todo el mundo la conoce, hombre, ¿A quien va a darle suspenso alguno?  
 
-Bah, todo el mundo conocía la historia de "Midway" y fue un taquillazo, igual que como pasó con "Memphis Belle" "Guadalcanal" o "la carga de la brigada ligera" ninguna de ella sufrió nada por el hecho de que todo el mundo conocía la historia. Antes al contrario: eso les dio más publicidad... 
 
-Creo que necesito un café-dijo Rick. 
 
-Venga a verme esta noche; les invito a usted y a la almirante Hayes a cenar. 
 
 
 
 
 
 
 
-Pues no termino de entender a este tipo-dijo Rick mientras se reclinaba en el asiento del coche- lo único que sé es que parece que se esta tomando esto en serio, pero no sé si lo hará bien... 
 
-Bueno, alguien tiene que hacerlo-dijo Lisa- de todos modos no hay manera de saber que tal saldrá hasta que este hecho. Y yo tampoco sé mucho de estas cosas. Pero lo cierto es que Exedor me ha insistido en que le dé carta blanca: dice que el proyecto de el film seguirá adelante con o sin nuestro apoyo, y que es mejor respaldarlo a ver si sale bien. Personalmente, creo que tiene razón. 
 
Maguire les abrió personalmente la puerta a la entrada; vestía de negro, pero sin corbata, lo que le daba un aire informal y formal a la vez. Lo curioso es que no desentonaba. Los acompañó a la mesa, mientras de deshacía en zalamerías; era evidente que también él esperaba sacar el respaldo de la RDF para el rodaje, y que Exedor se había negado, prudentemente, a dejarle entrever que ya se había tomado la desición de dárselo: eso lo obligaba a mostrarse más solícito y a hacer más méritos para merecerlo. 
 
Heath Ledger les esperaba a la mesa; lo habían regresado a tamaño humano, y era evidente que Maguire lo había emplazado a la cena como aliado: evidentemente contaba conque el carisma del australiano serviría para mostrarse más convincente a la hora de venderle a la almirante la idea del film. Hasta Minmei se encontraba a la cabecera de la mesa, acompañada de un Kyle sorprendentemente discreto. "Empezamos bien" pensó Rick. 
 
Exedor sobriamente vestido y Edwards con corbata (¡Con corbata! por Dios) flanqueaban la mesa. Una Miriya con un esplendido vestido verde botella, sin mangas y brillante coronaba la otra cabecera de la mesa, con Max a su izquierda y Riber a su derecha, vestidos de blanco y negro respectivamente. La ayudante de Sue al lado de Riber, con un vestido anaranjado brillante se sentaba entre él y Maguire. 
 
Rick se sorprendió de la helada educación que Minemi y Lisa se mostraban mutuamente; mucho mayor que las miradas de encendida rivalidad que se cruzaban entre Riber y él mismo. 
 
Al parecer Maguire era el único que no se daba por enterado, y la mirada divertida de la ayudante de Sue lo demostraba. 
 
-Permítame saludarla, almirante-dijo Heath Ledger, muy galante- es un placer verla en persona... 
 
-Rick me dijo que usted caracteriza muy bien a Khayron... 
 
-Oh, sí; los villanos son la mejor opción para un actor: son el personaje más recordado por el público en la mayoría de las películas, y cuando tienes la fortuna de caracterizar a un general tan odiado y temido como Khayron...pues tienes una oferta que realmente no puedes rechazar. 
 
-Un Khayon humano...eso sí que me parece algo difícil de hacer. ¿Cómo espera usted lograrlo?-preguntó la asistente de Sue. 
 
-Khayron no nos es odioso porque represente algo ajeno a nuestra cultura: al contrario. Lo odiamos porque es todo lo que no queremos ser: un héroe convertido en carnicero; un líder convencido que la victoria lo es todo; un ser para quién la guerra es un placer, un acto de violencia por el simple gusto de la violencia; un Mesías que sólo trae destrucción, y al mismo tiempo, tiene todo el magnetismo, toda la valentía, toda la admiración de sus hombres de un verdadero Mesías, y que muere como Cristo sacrificándose a sí mismo simplemente en pos de su ideal de victoria o muerte; es fundamentalmente un ser para quién la vida no es más que un medio de conseguir victorias, que tras ganar las batallas no tiene ningún valor: es su desprecio por la vida, la de los demás, la de sus enemigos, la de sus propios hombres, la de sí mismo, en definitiva, lo que nos lo hace tan repelente, y sin embargo, no vacila en seguir su credo de victoria a cualquier precio...y lo lleva hasta las últimas consecuencias. Eso es un Khayron Humano. Y mucho más creíble que el típico villano de cartón, el típico malo que siempre es vencido por el bien al final del filme...en ese tipo de villano ya no cree nadie. Sólo se puede hacer bien a Khayon si se le hace como a un ser humano. 
 
-Yo conocí a Khayron...personalmente-dijo Kyle- y no creo que estuviera demente ni mucho menos. Me dijo que si no fuera porque nos necesitaba a Minmei y a mí. Nos hubiera aplastado sólo por placer...y se le notaba que lo decía de veras. Pero se contenía, para sacar provecho del hecho de tenernos como rehenes. Y se le notaba que no estaba chiflado. 
 
-No entiendo que sentido tiene hacer un retrato así de un individuo que es simplemente el ser mas odiado de toda la guerra-dijo Riber- parece algo morboso... como la fascinación del mal. 
 
-El mal es siempre fascinante en si mismo-respondió Ledger- por eso es precisamente el personaje que mas potencial de éxito ofrece para un actor. Posiblemente se olvida a el héroe, tal vez a la chica, pero rara vez al actor que sabe convertirse a si mismo en la encarnación del mal. 
 
-Suena un poco raro tal como usted lo dice. 
 
-Suena comercial: lucrativo. 
 
¿Y si el villano es tan importante, como debe ser el héroe?-pregunto Lisa. 
 
-Creíble. Es el único requisito que debe cumplir. Si no parece tener siempre de su lado al guionista, convence. 
 
-Muy interesante-dijo la asistente de Sue- ¿Y donde buscaría usted al héroe por excelencia? 
 
-Eso es muy fácil-dijo Riber-A los héroes hay que buscarlos siempre entre los desplazados, entre los que han sido olvidados por los demás, entre los que regresan sin gloria de la batalla, a los que solo trajeron consigo el recuerdo de la guerra, no la fama, ni las victorias ni las medallas: solo el llanto de sus camaradas caídos tras el combate, solo el recuerdo de la promesas que no se cumplieron, solo la realidad de un regreso a un mundo que ya no es para ellos, que insiste en repetirles: "Aquí ya no hay nada que sea tuyo, tu que lo tuviste todo, tu que cumpliste con tu deber, tu que juraste regresar, hoy ya no tienes nada". 
 
Se produjo un silencio total tras las palabras del oficial. 
 
-Y ese será su parecer supongo...-empezó a decir Maguire. 
 
-No: esa es la realidad. He tenido entre mis manos la cabeza del camarada caído en batalla diciéndome sus últimas palabras. He visto morir maldiciendo a los veteranos mas endurecidos; he visto correr literalmente hacia la muerte a los más jóvenes derrochando su vida en el combate. Ese es el destino de los héroes. 
 
 
 
 
 
 
-Vamos, a la mesa, que ya esta la cena-dijo repente Minmei irrumpiendo en el salón bruscamente. Golpeaba una sartén con un grueso cucharón de madera mientras hablaba- No es cosa de dejar que se enfrié. 
 
-Venga, que tengo apetito-dijo la asistente de Sue-la verdad es que me comería un buey. 
 
Se sentaron a la mesa, magníficamente cubierta con mantelería blanco inmaculado, con la cristalería de las copas tintineando alegremente junto a la vajilla de plata, pero las fuentes estaban vacías aún. 
 
-Voy a ver que pasa con ese maldito horno-dijo Minmey- esas máquinas de microondas no hay manera de abrirlas, la puerta siempre se traba... 
 
-Rick es muy bueno con esos detalles-dijo Max- tal vez el pueda ayudarte. 
 
Hunter se dirigió tras la cantante. La cocina era de esas supermodernas tan llena de artefactos de todo tipo que uno se preguntaba si todos se usarían o si la mayoría estaba simplemente de adorno. 
 
-Me parece que sólo tienes que pulsar esta palanquita.-dijo Rick- ya está.  
 
Claro que estaba...bien quemado. 
 
-¡M...! ¡Kyle me va a hacer otra de sus escenitas, no hay manera de que entienda que no es culpa mía.-dijo Minmey- se ha quemado todo. 
 
-Bueno, algo habrá, por lo menos la ensalada te ha quedado muy bien. 
 
-¡A la basura con esto! ¡Que se las arreglen con frijoles!-dijo Minmey mientras usaba el abrelatas- Y si protesta...ya verá. 
 
-No deberías ser tan dura con él. 
 
-Mira, Rick voy a dejarlo: me tiene harta. Si por lo menos fuera capaz de intentar hacer algo por la relación pero no; tiene que ser igual todo siempre. 
 
Rick miro nerviosamente a su alrededor; no le hacía gracia ni lo íntimo de la conversación ni la posibilidad de que alguien entrara de repente en la cocina y lo encontrara participando en ella. 
 
-Todo el tiempo aguantándole su mal genio, su aire mandón, su palabrería, y encima que me ponga los cuernos, pues ya no; realmente no tengo ninguna necesidad. 
 
-¿Encima lo has visto con otra?-preguntó Rick. 
 
-¿Y NO ES ESE MI DESTINO?-Rick se puso colorado al oír eso-No sé que porras les pasa a ustedes lo hombres que no hay manera de que ninguno me sirva.-Su tono de voz se hizo más agudo, casi suplicante- Mírame, Rick: ¿Es que soy tan horrible acaso? ¿Es que no tengo corazón? ¿Si te hablan no respondes? ¿Si te acarician, no contestas? ¿Si te olvidan no sufres? ¿Cuál es mi problema? 
 
-Tú no tienes ningún problema, Minmey simplemente debes esperar un poco. 
 
-Rick, tú eres un buenazo en el sentido más tontorrete de la expresión; vamos que eres un ángel de cándido; tanto que casi me olvido que la misma jugarreta que me esta haciendo ahora el cascarrabias mandón inaguantable de Kyale me la habías hecho con toda tu exquisitez tú primero...pero es que me tiene hasta los huevos, ¡VAMOS QUE YA NO ME LO TRAGO MAS! 
 
-Ejem, ejem-dijo Rick mirando desesperadamente a la puerta de la cocina buscando una salida; no le hacía ni pizca de gracia encontrarse con Ledger, ni con Lisa ni con quién quisiera entrar allí: y segurito que, tarde o temprano, alguien terminaría por preguntarse que porras pasaba allí adentro y sólo era cuestión de tiempo para que algún hocico asomase por allí.  
 
Si era Max, bueno, todo terminaría en el sermonzazo habitual de "Tú no sabes lo que tienes, Rick, una buena relación con una buena chica como Lisa, y todavía haciendo estas imbecilidades..." Si era Miriya, mañana lo sabría todo el mundo. Si era Riber, ay, ay, ay, si era Riber... 
 
-Hey,que pasa aquí-LA PESADILLA SE HACIA REALIDAD, ALGUIEN ESTABA EN EL UMBRAL DE LA COCINA-¿Puedo ayudar? 
 
-Sí hombre, venga para acá, que lo estamos esperando-dijo Minmei con total desenfado mientras Rick maldecía por lo bajo entre dientes, tratando desesperadamente de escurrirse; el problema es que no había otro medio más que apurruñándose junto a la cantante, que le estaba obstruyendo el paso: maldijo la arquitectura de las cocinas moderna que no dejaban margen de maniobra, y se juró a sí mismo no dejarse meter en una cocina por ninguna mujer nunca jamás en la vida, mientras se deslizaba justo al lado de aquella maldita arpía... 
 
-EPA CUIDADO,-dijo la voz mientras Rick caía de bruces en las manos de quién sabe que persona que estaba detrás suyo: ¡El madito linóleo de las cocinas de hoy en día era tan resbaladizo! ¡Eran tumbas para pilotos! 
 
-No es nada, no es nada-dijo Rick rojo como un tomate- es que este piso esta resbaloso. 
 
-Pues claro que sí-dijo Edwars riendo. ¡Menos mal que era él! Dentro de lo malo, por lo menos era mejor que caer en los brazos de Maguire-Estas cocinas modernas no hay quién entienda porque las diseñan así. 
 
-¿Me podría llevar la fuente con la ensalada? En seguida les serviré el segundo plato-dijo Minmei. 
 
-Sería un honor-dijo Edwars, sorprendentemente galante- y cuente con mi ayuda si quiere que le lleve también el segundo plato.-La miro con simpatía, mientras le daba palmaditas en el hombro. ¡Quería ligársela! 
 
-Sí, sería excelente-dijo Minmei arrimándose a él con coquetería mientras Rick se escabullía con infinito alivio por la puerta-ojala todos los hombres se interesasen tanto por la cocina como usted... 
 
-Ja, es que yo siempre he dicho que la cocina es el mejor lugar para conocer REALMENTE a las mujeres-le llegaba a Rick la voz ya lejana de el tipo aquél.  
 
"Lo que es yo, no me dejo llevar a la cocina por ninguna mujer nunca más en la vida"  
Pensó Rick mientras se alejaba.  
 
-Todas descubren su verdadera naturaleza allí, es cuestión sólo de ser capaz de valorarlas, mi querida Minmei... 
 
"Sí, sí, sí: naranjas chinas". Pensó Rick mientras se sentaba en la silla. 
 
-¿Pasó algo con el horno, Rick? Te vez muy pálido...-dijo Max. 
 
-Sí, la verdad es que me llevé un buen susto... 
 
-¡A comer!-dijo Edwars poniendo la ensalada en la mesa. Rápidamente procedió a descorchar el vino, haciendo filigranas con el sacacorchos-propongo un brindis por el próximo éxito de nuestro nuevo film. 
 
¿Y dónde esta Lisa?-preguntó Rick. 
 
-Se ha ido a ayudar a Kayle a cargar con la bandeja de plata.-dijo Riber. 
 
-Pues ya no tardarán, supongo. 
 
 
 
 
 
 
Y por cierto que Lisa no veía la hora de volver a la mesa, ante las confidencias que le estaba haciendo Kayle... 
 
-ME TIENE HASTA LOS HUEVOS, LISA, YA NO LA AGUANTO-decía sin que le importara ni mucho ni poco que lo oyeran los demás-todo este tiempo aguantadote sus manías, sus caprichos, y encima haciendo de niñera suya con los propietarios de las disqueras, y ahora me sale conque no hemos madurado nuestra relación...encima me pone los cuernos. 
 
-¿La has visto con otro?-preguntó Lisa. 
 
-¿Y NO ES LO MISMO QUE PASO CONTIGO?-Lisa se puso colorada al oír eso-No hay manera con ustedes las mujeres... 
 
-Ya encontrarás a alguien Kyle-le dijo Lisa- es sólo cuestión de tiempo... 
 
Oyó unos pasos detrás suyo y se apresuró a echarse al hombro la bandeja de plata de una buena vez: no le hacía ni pizca de gracia encontrarse con otro de los sermones de Miriya si era ella la que venía; y menos que menos que fuera Rick... 
 
-¿Ya están listos? La mesa esta servida-ERA RIBER, peor que peor. 
 
-Ya vamos, ya vamos-dijo Lisa. 
 
-Cómo has cambiado, Lisita-le dijo él irónicamente, mientras Kyle se quedaba atrás- antes no eras tan "castigadora" y no volvías locos así a TODOS los hombres... 
 
-Mentecato. 
 
Todos se levantaron para recibir con júbilo a los recién llegados; la cena podía por fin empezar. 
 
-Bueno, propongo un brindis por nuestra almirante-dijo Maguire. 
 
-¡Brindemos! 
 
Todos levantaron las copas, mientras Minmei destapaba la bandeja del plato principal. 
 
-¡Pero esto son frijoles con carne enlatada!-dijo Kyle horrorizado. 
 
Lisa trago saliva, con escalofríos: Aquella era Minmei en total rebelión. Desde que la conoció en los tiempos en que sus padres dirigían el restaurante de El Dragón Blanco siempre se había enorgullecido de sus dotes como chef.  
 
¡Y cómo la ponía verde oír a Rick contar lo mucho mejor que cocinaba siempre esa chica!  
 
Si era capaz de servir ESO en plena cena de sociedad, era que las cosas entre ella y Kayle iban mal DE VERDAD. Y parecía tener toda la gana de solventar sus diferencias en público allí mismo sin que se le importara un ardite los invitados, pensó. No quisiera estar en el pellejo de Kayle ahora... 
 
-¡Sí que lo son! No los he comido desde ya no me acuerdo cuando-dijo Maguire riéndose-una idea muy original de su parte, señorita Minmei. Recuerdo que mi madre me las servía con manzanas horneadas-y encima se ponía nostálgico el tipo-y realmente yo le pedía que sirviera fresas, pero ella era maniática de las manzanas, no supe nunca porqué. El caso es que le cogí odio a las manzanas, pero la carne con frijoles aún me hace recordad mi niñez...era yo tan pequeño, en aquel entonces. 
 
-Pues lo mismo digo-dijo Heath Ledger entusiasmado- tanto tiempo que llevo comiendo esas comidas caras que le preparan a las estrellas. ¡Ya se me había olvidado el sabor de este plato!-por un momento Kyle lo miro incrédulo; pero lo cierto es que Heath no parecía estárselo inventando-¿Y que hay de segundo? 
 
-Ensalada-dijo Minmei lacónicamente. 
 
Por el aspecto que tenía era evidente que la mayoría de los comensales pasaban. Sólo Rick, con no poca lástima se sirvió un poco. "Miren a Rick le gusta" no se privó de decir Minmei ante el silencio general... 
 
-Tendrá material para su filme, Maguire-dijo Edwars condesencientemente-sobre todo ahora que vamos a dirigir una nueva ofensiva contra los Maestros de la Robotechnia. Yo mismo he sido nombrado sub-director de la misma... 
 
-¿Cuándo?-preguntó Lisa intencionadamente. 
 
-Pues ya mismo-dijo Edwards con socarronería-El gobierno acaba de confirmarme en el cargo justo antes de esta cena... 
 
-Es verdad-dijo Exedor sobriamente-Debo decirle almirante Hayes, que la noticia me ha sido confirmada justo antes de venir. No cabe duda que el señor Edwars tiene apoyos muy influyentes en el gobierno.-añadió en tono neutro, pero de forma que no dejara lugar a dudas; no era el momento adecuado para una confrontación. 
 
-Parece usted muy ansioso de participar en esa ofensiva-dijo la asistente de Sue. 
 
-Pues claro que sí: será el momento decisivo para terminar con la guerra. Y puedo decirle que yo mismo he tenido la ocasión de participar en otras operaciones anteriores. Es natural que lo haga en esta.  
 
-Tendré que reunirme con usted mañana mismo, Edwars-dijo Lisa- no es un tema que se pueda tocar en una cena civil.  
 
-Naturalmente-dijo Edwars inclinándose ceremoniosamente ante Lisa-ya tendremos ocasión de hablar más adelante... 
 
 
 
 
 
 
 
-Toda esa presunción, esa condescendencia, esa... esa... -Lisa resopló furiosamente, mientras Max y Miriya se miraban uno al otro en los asientos de atrás, y Rick conducía nerviosamente al lado suyo-Bueno, estuvo junto a mi padre en esa maldita operación del Gran Cañón en la base de Alaska y la verdad es que las noticias que tengo suyas no son muy halagadoras que digamos. ¡Pero esto! Decirme así no más que mañana mismo va el muy advenedizo a formar parte de mi personal. ¡Vamos! Que... 
 
-Si Exedor dice que tiene quién lo apoye en las alturas, debe ser verdad, Lisa-interrumpió Rick- Y la manera en que lo dijo hace leer entre líneas: la verdad es que no me parece muy sensato atacarlo de frente en este mismo momento... 
 
-¡Me tiene sin cuidado! ¡Mañana mismo se las voy a cantar claras a ese... a ese..! 
 
-Ejem, espero que no vayan a chocarme el coche otra vez-dijo Max tímidamente-no es por nada, pero es que apenas acaban de pagarme la última reparación, y la verdad es que estrenarse de nuevo con otra visita a mi mecánico, pues me sabría mal. "¿Por que no le pide usted a sus amigos que le compren otro cacharro y así se van más a lo práctico?" segurito que me va a preguntar... 
 
Miriya se rió por lo bajo. 
 
Lisa los miro airadamente, pero Rick habló con toda seriedad: 
 
-Nos esta siguiendo ahora mismo, muchachos:lo veo por el espejo retrovisor, y francamente creo que no vas a tener que esperar hasta mañana para hablar con él, Lisa. Esta justo detrás de nosotros. 
 
-¿Cómo lo sabes? 
 
-Muy fácil Lisa: no hay muchos Mercedes Benz como ese; con el blindaje en las ventanillas a prueba de rayos... 
 
-Sí; no se le puede acusar de no querer llamar la atención. 
 
-¡No me gusta que nos siga un auto blindado, por muy Mercedes Benz que sea!-dijo Max violentamente-Y ese tipo me parece un tipo peligroso; no me sorprendería que pensara en jugarnos una mala pasada... 
 
-Por Dios, Max, que poco conoces a ese sujeto si crees que va a atacarnos por la espalda delante de todo el mundo con su propio e inconfundible coche-dijo Lisa despectivamente-segurito que sólo quiere ponernos nerviosos... 
 
 
 
¡Friiiiiincchhhh! 
 
 
Rick palideció cuando Lisa le pisó el freno de golpe encima de su propio pie: pero el Mercedes Benz esquivó el impacto, echándose rápidamente a un lado. Ante los incrédulos ojos de todos Lisa se bajó del coche como si tal cosa. 
 
-Me parece Edwars, que su chofer es rápido de reflejos, pero muy poco sutil. Si tiene usted intención de hablar conmigo no trate de disimularlo tan mal. 
 
Edwars se bajó de Mercedes sin vacilar. 
 
-Sólo tenía la intención de acortar un poco las distancias, almirante Hayes. 
 
-Pues lo intenta usted en vano. 
 
Le dio la espalda sin más.  
 
-Hable con el oficial Hunter si tiene algo que decirme. Le recibiré a usted mañana en mi despacho. Buenas noches. 
 
Rick se bajó del coche. Max se encargó de arrancar. Se quedaron solos. 
 
-Bueno, Hunter, la verdad es que sí tengo algo que decirle: he conseguido el puesto de segundo al mando y espero que no intente nadie discutírmelo. 
 
-Lo tiene sobre el papel. De sus méritos dependerá cuánta autoridad le dé la almirante cuando estemos en el espacio. Ya sabe usted cómo son estas cosas: en el espacio no hay superiores. Simplemente, todo depende de las órdenes de el almirante principal. Como en tiempos de Global. 
 
Edwars sonrió. 
 
-Le garantizo que mis intenciones son precisamente colaborar con la almirante todo lo que pueda. Ahora bien, como sub-director tengo los poderes más amplios para tomar ciertas disposiciones antes de que zarpemos al espacio... 
 
-¿Como cuáles? 
 
-Voy a dar algunas patadas en el trasero, Hunter. Para empezar pienso poner a ese chico tan brillante, Riber a cargo del escuadrón de ataque cuando tengamos que poner las cartas boca arriba con los Maestros de la Robotechnia...y a quién no le guste puede empezar a ir haciendo las maletas y marcharse desde ya. También pienso llevar a un soporte moral para las tropas, y directamente bajo mis órdenes. 
 
-A Minmei, supongo. 
 
-Ciertamente, ciertamente. Tiene usted rapidez para comprender las cosas...espero que la almirante comparta con usted esta cualidad. 
 
Se dirigió hacia su coche riéndose diabólicamente. Y a Rick le pareció que se reía como el mismo diablo... 
 
 
 
 
 
 
 
-Bien, ¿que te dijo?-preguntó Lisa mientras se alisaba el cabello. Naturalmente no lo necesitaba en lo más mínimo, su pelo estaba impecablemente peinado, como el almidonado eternamente sin arrugas de su uniforme. (¡Tanto tiempo de conocerla y nunca la había visto despeinada!) Tampoco necesitaba para nada leer los reportes que tenía en la mesita de noche: Rick estaba seguro que ya se los sabía. Pero por alguna razón Lisa parecía sentirse más segura con el ritual de alisarse el pelo y leer los reportes. Una de esas cosas que simplemente le gustaba tener cerca, porque la hacían sentirse segura...entre las que a veces Rick tenía la incómoda sospecha de que estaba incluido también él mismo-yo no tengo paciencia para el sinfín de insolencias que segurito que te iba a soltar, así que por favor dame la versión resumida. 
 
-"Voy a dar algunas patadas en el trasero, Hunter"-dijo Rick imitando gustosamente la voz de Edwards- y la verdad es que hablaba en serio. Es de verdad que tiene apoyo de arriba. O no se hubiera atrevido a... 
 
-Corrección: que el cree que tiene apoyo de arriba. 
 
Rick la miró asombrado. ¿Podía ser tan estúpida de no comprender que Edwards nunca osaría enfrentarla en forma directa sin haberlo preparado todo cuidadosamente de antemano? 
 
-Mira Lisa; las patadas en el trasero comenzaron ya mismo. Quiere que Minmei vaya en el SDF-3 supuestamente para levantar la moral de los soldados... en realidad la quiere allí para él.  
 
-Esta loco. -dijo Lisa con desprecio-No pienso tolerar a Mimnei a bordo de MI nave. En calidad de nada... 
 
-Y quiere que Riber sea la punta de lanza del ataque contra los Maestros de la Robotechnia. Le va a dar la posición más peligrosa de todas. 
 
-SOBRE MI CADAVER. ESO NO LO TOLERARE JAMAS-Rick se asustó ante la explosión de violencia salvaje con que Lisa tiraba el cepillo por los aires contra la pared-NO PERMITIRE RIBER MARCHE OTRA VEZ AL COMBATE... 
 
-¿Pero es que no tienes ojos en la cara, Lisa? Claro que eso es precisamente lo que él quiere. Para eso lo hace: para herirte, para darse el gustazo de decirle al gobierno que no tienes la madera necesaria para ser almirante después de Global; que antepones tus sentimientos a tu deber; que no eres lo bastante fuerte... que no tienes ni sal en la sangre ni acero en las tripas. Es una trampa. Y lo malo no es eso. No, lo peor es que te ha descubierto tu punto débil. 
 
-No toleraré jamás que Riber marche otra vez al combate-repitió Lisa- No me importa pactar otro de los negocios sucios con Edwards; no es más que otro mal nacido con el que yo tengo siempre que tratar. Pero Riber no, maldición, eso sí que no. Riber no irá a esta maldita guerra. No lo permitiré. 
 
-No tienes materialmente ninguna manera de impedirlo, Lisa-dijo Rick pacientemente-El quiere ir, y así no hay manera de evitarlo. Exedor te lo dio a entender muy claro; no te conviene detenerlo AHORA. Será mejor para ti que le sigas la corriente, de momento. Si caes en su trampa, si le sigues el juego, y te le opones de frente, no ganarás nada con ello, y sí en cambio perderás mucho. 
 
Se dio la vuelta, estaba harto de aquella conversación, no quería seguir hablando más del tema. Le resultaba violento. Y no le gustaba ver la manera en que Lisa perdía su ecuanimidad emocional delante de su propios ojos, cada vez que se mencionaba ese maldito nombre. 
 
-Pensaba que tú me comprenderías, Rick-la voz de Lisa sonaba débil, pero acusadora a sus espaldas. 
 
Rick suspiró. ¿Como decirle que la comprendía demasiado bien, que no tenía manera de evitarlo? 
 
-¿Recuerdas lo que me dijiste antes del rescate de Minmei cuando era rehén de Khayron? "A veces los sentimientos no funcionan como quisiéramos".  
 
-¿Me juzgas, Rick? 
 
-No: te compadezco. 
 
 
 
Nota del autor: Sí, ya sé que Heath Ledger ya no puede hacer el papel de Khayron, pero es que después de darle vueltas al asunto, pues la verdad, es que no creo que hubiera alguien mejor para ese rol. (después de haberlo visto en El Caballero Oscuro, me quedé pensando si acaso habría alguien mejor para ese rol, y llegué a la conclusión de que muy difícil. Y después de todo, es un fanfic. ¿No? Pues me di el gusto de ponerlo en el papel. Si alguno de ustedes sabe de un Khayron mejor, pues que lo diga: sería muy interesante saber las opiniones de los demás. Y como me habían pedido que no dejara en blanco ese rol para no quedarse con la duda de con quién había pensado poner a Khayron...) 
 
Espero que les haya gustado este capítulo. El próximo espero también que les interese y que, como siempre, sigan mandandome los comentarios que tanto me han prodigado hasta ahora.  
 

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Author email / email del autor: zeitzleralexanderARROBAyahoo.com.mx