fanfic_name = En la Tormenta

chapter = 2

author = Seferino Rengel

Rating = AP15

Type = Adventure

fanfic = Super Dimensional Fortress Macross: En la Tormenta

 

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PARTE 2: ENTRE PLANETAS

 

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Han transcurrido dos meses desde que la operación de pliegue

espacial llevo al Macross, la isla Ataria Sur con la ciudad, dos

portaviones, una buena porción de océano y a 56 000 personas al otro

lado del sistema solar, mas allá de la orbita de Plutón.

 

Durante su viaje de retorno a la Tierra, la nave repelió varios

ataques, utilizando una transformación modular donde la nave toma la

forma de un inmenso humanoide que le permite disparar su inmenso cañón

de partículas. Pero al realizarla la primera, destruyo gran parte de la

ciudad que fue reconstruida en su interior, debido a cambios en su

estructura interna. Pero con el tiempo los daños han sido reparados y

todo a regresado a la normalidad. Relativa normalidad.

 

Para nadie a sido fácil este viaje, mas que todo para el personal

militar, quienes se han visto devastados por las continuas batallas

intensas, pero de corta duración, que cada vez asolan a la nave a

medida que se aproximan a la Tierra. Debido a esta situación el Capitán

Gloval se ha visto en la penosa necesidad de ordenar el reclutamiento

de todo aquel apto para poder pilotar, para adosarlos a la desgastada

lista de pilotos de combate.

 

Para poder instruir y de alguna forma, tratar de adiestrar

adecuadamente a estos nuevos pilotos, los pilotos con mayor experiencia

han cumplido la función de instructores de vuelo y maestros. En solo

unas semanas, han tenido que condensar años de aprendizaje y

adiestramiento. Cada seis semanas deben prepararse, como mínimo unos

cincuenta pilotos nuevos, para tratar de cubrir las plazas que son

agotadas casi a un ritmo mayor perdidas en combate.

 

Mientras trata de instruir a los grupos de pilotos en el

funcionamiento básico de los Valkyrie, la Mayor Nikolayev siente algo

de remordimiento. Ya ha ayudado a instruir a tantos pilotos, muchos de

ellos ya han dejado sus huesos flotando en él frió vació del espacio.

Muchos de ellos se incorporan al ejercito para ayudar realmente, otros

lo hace porque creen que es algo ‘divertido’. Ella no sabe que le ven

de divertido.

 

La guerra es terrible, mas que todo los saben los militares de

carrera como ella, que han estado tantos años luchando contra enemigos

tanto extranjeros como nacionales. Y quien más lo sabe como los

ciudadanos rusos, que han librado guerra desde hace siglos, y más aun

durante el siglo pasado y el principio del presente.

 

Los civiles tienen la falsa ilusión de que los militares disfrutan

con la destrucción y las muertes que producen los implementos bélicos.

No cree que exista alguien en la nave que disfrute con la guerra, pero

si que muchos quisieran hacer algo para que esta terminara. De todas

formas ella deja de pensar en eso en ese momento, prefiriendo terminar

su comida. A estado sola todo el día, ya que su sesión de instrucciones

en las mañanas, pasando todo el resto del día en estado de alerta en

caso de ataque.

 

 

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Quien se encuentra en turno para volar es el oficial ejecutivo de su

escuadrón, el Capitán Engel. Su rutina era la misma desde hace semanas.

Le toma solo dos minutos ponerse su traje de vuelo y comprobar su

integridad. Luego se encamina, en solo un minuto hasta el hangar donde

su Valkyrie esta siendo revisado por los jefes de línea.

 

Su Valkyrie pintado enteramente de negro (aunque en realidad es un

gris oscuro cenizo) con algunas franjas rojas ya tiene montado los

cuatro pilones subalares que cargan cada uno 3 mísiles en cada anclaje.

Se agacha por debajo de la nariz para mirar de frente el inmenso fusil

GU-11, completamente cargado. Luego de una rápida inspección, sube

presuroso por la escalerilla. El jefe de línea le ayuda a atarse las

correas y verificar los instrumentos por sobre su hombro.

 

"Esta a punto Capitán. Tenga cuidado". - dice el jefe de línea

dándole una palmada en el casco para luego saltar al suelo y meter la

pequeña escalerilla retráctil en su receptáculo en el fuselaje.

 

Finalmente una pequeña grúa lo remolca hacia la esclusa de aire y

hasta el elevador, donde lo alinean junto a otro Valkyrie dispuesto

para la misión de patrulla de combate aéreo. Es extraño que apliquen

los mismos términos aéreos en el espacio, mas que todo por la comodidad

y para tener claro de que se esta hablando.

 

Por instinto, se voltea cuando detienen el avión en el elevador,

siempre a tenido el pensamiento secreto de que la cola de su Valkyrie

queda colgando fuera de la plataforma y que un pequeño error de calculo

del conductor lo echaría por la borda. Desde luego eso no ocurre aquí

en el espacio, pero si ha escuchado esos casos en los portaviones en

tierra, donde el elevador es mucho más pequeño.

 

A solo cuatro minutos de haber llegado al hangar, su Valkyrie es

alineado con una de las catapultas y fijado a ella. Engel mira sus

instrumentos y luego hace una seña a uno de los oficiales de cubierta y

este hace varias señas con las dos batutas luminosas. En menos de un

segundo su Valkyrie es catapultado lejos de la cubierta del Prometheus.

 

A pesar de ser mucho más ‘suave’, la súbita aceleración le oprime

en su asiento, impidiéndole controlar su caza por un par de segundos.

Si hubiera estado en tierra, inmediatamente hubiera realizado un giro a

la izquierda, ya que, en caso de una falla en los motores, estaría

alejado del camino del buque, para que este no le arrolle en su marcha.

Pero aquí arriba (siempre ha pensado que el espacio esta arriba)

continua en línea recta. La aceleración de la catapulta, mas la de sus

propios motores mas los aterradores 50 km/seg a los que se desplaza el

Macross.

 

Por supuesto, que cuando se realizan operaciones de vuelo, la

velocidad de la nave es así de ‘lenta’ por varias horas, ya que a

velocidad de crucero llega a los inimaginables 500 km/seg....

 

La estrategia del enemigo es extraña. Al parecer han concentrado su

ataque hacia el Macross, aunque no han tenido contacto con la tierra.

Pero los ataques parecen destinados a no destruir la nave. ¿Por qué? Al

parecer no hay repuesta. Pero pareciese que se concentran mas en gastar

a los escuadrones de caza, porque prácticamente en cada ataque, uno de

cada cinco pilotos que sale, no regresa.

 

Varias horas después, algo entumido regresa a la cubierta de la

nave, realizando un aterrizaje en modalidad Gerwalk, ya que con Macross

en su configuración humanoide no permite los aterrizajes normales.

Algo agotado, finalmente sale de la cabina, satisfecho por haber

concluido sin ningún inconveniente, mas aun, sin tener que dar un solo

disparo.

 

 

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Para el 14 de abril de 2009, Macross esta ya cercano a la orbita

del planeta Saturno. El planeta es inmenso, a pesar de estar a unas

cuantas centenas de miles de kilómetros. Viniendo desde el exterior del

sistema solar, puede verse en media luna, por así decirlo, donde una

buena parte de sus anillos están resplandeciendo, mientras otras aun se

encuentran en la oscuridad.

 

Por el peligro de dañarse con las partículas de polvo y roca,

muchas de ellas difuminadas alrededor del gran planeta, la velocidad de

crucero se a reducido, lo que prolonga por varias semanas el paso de la

nave cerca del planeta. Durante su viaje, es la primer vez que

Macross, en su orbita hiperbólica hacia la tierra, se encuentra con un

planeta.

 

Vista desde el comedor de oficiales, el planeta se ve ladeado, con

sus anillos haciendo una increíble línea vertical que lo cruza en el

ecuador. Nikolayev mira fijamente el planeta, mientras se aproxima a la

distancia. Nikolayev se a sentado en la mesa mas cercana a la inmensa

ventana. Intenta terminar de leer el libro con el cual lleva semanas,

pareciera que le a tomado una eternidad el solo llegar a la mitad. Sin

mirar levanta lentamente el cigarrillo que había estado consumiéndose

en el cenicero desde hacia rato.

 

"¿Ocupada?"

 

Cuando levanta la vista se consigue con el Capitán Engel, quien sin

mucho protocolo se sienta del otro lado de la pequeña mesa.

 

"Contemplando la vista."

 

"Eso se nota". - Engel estira la mano por sobre la mesa y toca la

solapa del libro. "¿Qué lees?"

 

Ella le muestra el libro, ‘Lolita’.

 

"¿De que trata?". - pregunta solo para ver que dice, porque sabe de

que trata.

 

"Es una novela. Interesante, quizás te la preste."

 

"Has oído que leer en exceso desgasta la vista."

 

"Lo mismo dicen del sexo". - dice distraída, dando una calada al

cigarrillo.

 

Engel sonríe por el comentario, mientras mira por un momento a

Saturno.

 

"¿Cuál de las dos es la que te afecto?". - pregunta Engel aun

sonriendo.

 

Yelena le mira por sobre sus anteojos, no dice nada y regresa a su

lectura.

 

"Es raro verte reír por algo, aunque sea a expensas de los demás". -

dice Nikolayev luego de unos minutos de silencio.

 

"A veces no vale la pena."

 

"No lo creo, todos piensas que eres un amargado sin remedio."

 

"Estoy atrapado en una nave espacial trabajando dieciséis horas al

día. Peleamos contra alienígenas dispuestos a matarnos. A parte de eso

no veo ninguna razón para ser feliz."

 

"No se de que te estas quejando, yo también estoy en las mismas. O

que pensabas, ¿qué me la paso sentada aquí leyendo?"

 

"No es eso Lena, es que me molesto demasiado fácil por cualquier

cosa."

 

"No me sorprende."

 

Engel gruñe mientras levanta su taza de café, mientras mira como

Yelena es envuelta lentamente en la nube de su cigarrillo. Levanta la

cajetilla de cigarrillo blanco con azul que esta al lado del cenicero y

la examina unos minutos, dándose cuenta que son unos cigarrillos rusos.

 

"No deberías fumar esos, Lena. He leído estudios que afirman que

pueden matarte."

 

"Bueno, pues. Geni. He escuchado, que esos reportes y sin duda son

correctos. Pero creo que no moriré de eso". - refunfuña mientras

termina de fumar el cigarrillo, para luego quedar en silencio.

 

 

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"Mañana, Macross entrara en los anillos de Saturno. Un grupo de

nuestras fuerzas de defensas iniciara la ofensiva. Todos recibirán sus

ordenes mañana pero solo quiero que piensen en una cosa, Macross. Todos

dependemos de ustedes señores si hay alguien a quien deseen ver háganlo

esta noche. Es todo."

 

Son las palabras de un oficial, quien por lo visto luce todo el aire

de no estar dispuesto a subirse a una cabina y sacrificar su vida.

‘Todos dependemos de ustedes’. A Nikolayev le parecieron las palabras

menos adecuadas en ese momento. Si ella hubiera estado en el estrado

hubiera dicho ‘todo depende de nosotros’ pero no es ella. Quizás los

jóvenes pilotos alineados enfrente del estrado no notaron la sutil

diferencia, la alienación.

 

Prefirió no decir nada y continuar mirando el rostro de ese sujeto.

Tan pronto termino de hablar se dio la vuelta y sin decir nada se alejo

de allí.

 

 

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En la sala de reunios del cuartel, están reunidos todos los pilotos

de tres escuadrones, Skull, Apollo y Ángel.

 

"Señores, esta es la misión que se nos a encomendado". - empieza a

decir el Comandante Focker, de pie delante de una de las pantallas de

la sala. "Los escuadrones Skull y Apollo, junto con los escuadrones

verde, amarillo y blanco iniciaran un ataque contra las formaciones

enemigas para atraerlas hasta el punto de reunión Alfa. Allí -señala el

lugar en la imagen- el escuadrón Ángel con el grupo de combate

iniciaran un ataque relámpago contra los grupos enemigos, para

forzarlos a comprometer el resto de sus fuerzas para un nuevo ataque,

por parte de los cañones pesados de Macross."

 

Cuando Focker termina de hablar, la Mayor Nikolayev ocupa su puesto,

mientras la imagen de la pantalla cambia para enfocarse en el área que

cruzara los escuadrones asignados a ella.

 

"Bueno gente. Como indico el Comandante, los escuadrones se

aproximaran a la división de Cassini donde se separara el grupo de

ataque. Los escuadrones de interceptación. El escuadrón Ángel estará

oculto entre los restos de los anillos, junto a los escuadrones

dispersos en esta área. Estaremos armados con RMS, así que tengan

cuidado con quien se tropiezan en la oscuridad. ¿Preguntas?... bien,

andando."

 

 

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"Todos los pilotos abordar sus naves. Esta operación será dirigida a

la división de Cassini. Repito, esta operación será dirigida a la

división de Cassini."

 

A la mañana siguiente, las urgentes llamadas de parte de la

Comandante Hayase han despertado a todo el mundo.

 

"Todos los pilotos prepararse a pasar lista en Prometheus. Los

escuadrones naranja, azul y rojo iniciaran su preparación para despegar

en el segundo nivel. Los escuadrones restantes prepárense para despegar

en el sector asignado."

 

Nikolayev y Engel ya están corriendo a sus aparatos, inclusive antes

de iniciarse la alarma, desde luego es debido a que conocen de antemano

el plan a ejecutarse.

 

"Escuadrones naranja y azul, procedan a división de Cassini punto R-

dieciocho e inician maniobras de señuelo. Escuadrones verde, amarillo y

blanco, utilicen las longitudes de onda Ku-L-cuatro para integrarse a

los patrones de ataque."

 

"Bueno gente, esos somos nosotros. Nada de juegos, esta vez seremos

nosotros los agresores. Si ven a un enemigo, no duden en dispararle". -

explica la Mayor Nikolayev mientras su Valkyrie se enfila en formación

con los otros hacia la oscuridad de los anillos.

 

En ese punto los escuadrones de ataque se separan de los de señuelo,

para continuar hacia la línea enemigo.

 

"Líder Skull a todos los Valkyrie. En doce segundos entraremos en la

zona de sombra, así que mantengan un ojo en el hielo y el otro en sus

naves". - comunica el Mayor Focker.

 

Justo al entrar en la zona de sombras, les es difícil inclusive

observar la nariz de su avión. La tenue iluminación que le rodea

proviene mas que todo de las tres pantallas frontales y el visor HUD

con su fantasmal luminiscencia verde. Aunque también la fosforescencia

amarilla de las hombreras de su traje le hacen destacar en la

oscuridad. Lo único que le salva de caer fulminada por el choque de un

fragmento son las indicaciones del radar. Siguiendo una señal

sincronizada, todos los cazas del grupo se detienen en medio de la

oscuridad.

 

Nikolayev mantiene su Valkyrie suspendido sobre el hielo, dando

pequeños toques a su palanca para impedir golpear algún fragmento móvil

cerca de ella. Lo mismo hacen varios del grupo. El Capitán Engel esta

casi aprisionado por el hielo y da un pequeño impulso hacia delante,

delicadamente, pero una pequeña roca golpea su timón derecho,

estremeciendo toda la nave. Gira la vista, mas por instinto que por

realmente lograr ver algo, ya que ni siquiera tiene encendidas las luce

de posicionamiento. Pero antes de poder acostumbrar la vista a la

penumbra, las explosiones de los grupos de ataque enemigo iluminan la

distancia.

 

"Solo unos momentos más". - susurra por la radio la Mayor, esperando

a que Macross dispare su arma principal contra el crucero enemigo que

se aproxima lentamente a la zona de blanco.

 

"Siguen sin disparar". - comenta Engel.

 

"Esperemos unos segundos mas, Gennadi Antonovich."

 

Pero pasan los segundos y no pasa nada. Luego de un minuto completo,

el crucero enemigo esquiva la zona de blanco y se encamina hacia

Macross. Nada ocurre, la nave continua como si nada. El Macross parece

no tener intenciones de disparar.

 

"De acuerdo ¿Cuántos segundos?"

 

"Esta bien... tenemos un problema. Bueno gente, parece que algo les

salió mal a los del Macross. Los escuadrones amarillo y verde diríjase

a apoyar al grupo Skull, los demás dirijámonos al Macross". - ordena

Nikolayev, pasando su Valkyrie a modalidad Gerwalk y dar una media

vuelta en medio del hielo, acelerando hacia Macross.

 

Cuando llegan a las cercanías de la nave, son superados casi cinco a

uno por los cazas Zentraedi, que derriban en pocos segundos a muchos de

los cazas a medida que llegan. Nikolayev es golpeada por los fragmentos

de un Pod que alguien derriba, astillando visiblemente el cristal de la

cabina.

 

"¡Dios! ¡Vamos a morir!". - dice un piloto por la radio.

 

"¡Deja de hablar así! Me pones nerviosa". - gruñe Nikolayev

esquivando tanto mísiles, disparos, Valkyrie y Regult.

 

"¿¡Que vamos a hacer!?". - pregunta la voz de Engel, quien se ve muy

sereno.

 

"¡¡Cúbreme!!". - dice ella mientras reconvierte su Valkyrie a

modalidad caza.

 

"¡¿Que te cubra?! ¡¡Yelena!!". - exclama haciendo lo mismo.

 

Nikolayev se aproxima a toda velocidad. Mientras Engel, en modalidad

Gerwalk dispara contra los Pod que se atraviesan en su camino.

Nikolayev sopesa todos los riesgos. Piensa en que Macross no ha probado

todas sus opciones. Ella aun carga los RMS-1 con cabeza nuclear. La

experiencia le había enseñado que en momentos desesperados, solo las

personas audaces que no se andan con miramientos pueden dar una

esperanza de victoria.

 

"Aquí líder Ángel, estoy realizando una acción unilateral de

emergencia."

 

En el puente del Macross, Gloval entendió lo que quiso decir.

 

"¿Señor?". - pregunta Claudia.

 

"Esta directamente en nuestra línea de ataque". - explica Misa,

quien esta dirigiendo la nave contra el crucero.

 

En pocos segundos, Gloval pensó que si la deja continuar,

seguramente destruiría el crucero, pero es una explosión nuclear, que

podría dañar o destruir muchos de los Valkyrie de la zona, incluyendo

comprometer la integridad de Macross.

 

"Negativo, dile que regrese."

 

Nikolayev se encamina directamente contra el crucero enemigo, al

estar lo suficientemente cerca, estira la mano y arma el RMS, misil

nuclear para dispararlo contra el crucero.

 

"Aquí Gunsight Uno a Líder Ángel. Petición denegada. Retírese de la

zona". - ordena Misa.

 

"Pero..."

 

"Es una orden."

 

De mala gana y con dificultad vuelve su Valkyrie y regresa por donde

venia. Pero su rabia cambia a sorpresa y horror al ver como el SDF-1,

como un inmenso boxeador, se encuentra acercándose hacia el crucero,

golpeándolo como si le diera un inmenso puñetazo. Aun sorprendida

empieza a descargar parte de su rabia contra los Regult, que se

arremolinan sobre ella. Se afinca sobre los pedales al pasar a modo

Battroid y empezar a disparar a todos, derribándolos en pocos segundos.

 

Se dispones a regresar a Macross, pero antes de poder alejarse lo

suficiente, un Pod, como salido de la nada empieza a disparar. Uno de

los disparos da justo detrás de la cabina, haciendo estallar en cristal

y liberando toda la atmósfera de la cabina con un estallido seco al

despresurizarse. Ahora todo es silencioso. Solo el sonido de su

agitada respiración es lo que puede percibir. Gira la cabeza mientras

continua disparando contra el Regult que le asecha. Trata de

dispararle, pero este esta demasiado cerca para poder darle. Se da

cuenta que todo se esta poniendo oscuro de pronto, pero no hace caso

mientras continua disparando.

 

Finalmente se queda sin munición. Es cuando se da cuenta de un leve

siseo a través de su traje. Baja la mirada y se da cuenta que tiene un

agujero en el hombro por donde se esta escapando el aire. Nikolayev

agarra la palanca tratando de equilibrar la nave. Aprieta en control

con fuerza, ya que siente que como si no la estuviera tocando. Pestañea

varias veces mientras su pantalla delantera parpadea incesantemente.

Gira la cabeza, pero es como si mirara a través de una neblina cada vez

mas negra y espesa.

 

El Pod parece tan grande como la vida, de un momento a otro le

dispararía. Y no solamente a su Valkyrie, sino que le dispararía a

‘ella’. Finalmente suelta la palanca, mientras su vista se nubla cada

vez mas. Abre la boca como un pez fuera del agua, tratando de atrapar

el poco oxigeno que no a escapado de su traje, dejándose vencer por el

intenso frió que siente de repente. Antes de perder el conocimiento,

mira como el Regult es destruido por una ráfaga de metralla que surge

de una zona oculta por la nariz de su avión.

 

Después, todo es oscuridad.

 

 

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"¿Cree que despierte pronto?"

 

La voz parece provenir del vació. Lo único que logra ver es una gran

nebulosidad blanquecina que se expande alrededor de ella. Se siente

flotar en el aire, mientras escucha los sonidos de voces que le hablan.

Que le llaman.

 

"No estoy segura de su condición, posiblemente sufra los efectos de

una seria hipoxia. Si no la hubieran rescatado..."

 

"Así es Doctora..."

 

Yelena abre los ojos, quedando deslumbrada por la luz de la

habitación. Intenta incorporarse, pero una mano se posa en su hombro

impidiéndole levantarse. Forcejea débilmente, pero a la final, se queda

quieta, suspirando débilmente. Llega a su nariz ese olor a

desinfectante. El olor de los hospitales le aterra, porque era un olor

que asocia al dolor.

 

"Mayor. Aun no esta en condición. ¿Se sientes bien? ¿Le duele

algo?". - pregunta la doctora, mientras retira su mano de su hombro.

 

"Estoy bien."

 

"¿Claro que sí? ¿Y la cabeza?". - pregunta Engel, quien esta del

otro lado de la cama.

 

"Me duele mucho.".

 

"No me sorprende que te duela. Estuviste desmayada desde hace tres

días."

 

"¿Tres días?... debe ser por eso que tengo tanta hambre."

 

"Así que quiero hacerle algunas pruebas". - dice la doctora,

mientras revisa los datos del pequeño computador al lado de la cama

para luego salir.

 

"No tengo intención de permanecer aquí, doctora". - se queja

Nikolayev.

 

"No se si te habrás dado cuenta que ella ya salió. Estuviste tres

días inconsciente...". - empieza a decir Engel.

 

"Eso sería completamente..."

 

"¡Eh! Órdenes del médico. Cierra los ojos y trata de relajarte."

 

"No, tengo que continuar en servicio, me siento bien. Necesitamos a

todos los pilotos disponibles, ordenes directas del Capitán."

 

"En asuntos médicos, la doctora puede anular las órdenes de un

superior". - dice El, citando el reglamento. "Además te traje esto."

 

"Gracias, pero no hace falta. Debieron costarte mucho". - dice ella

mirando como Engel pone un ramo de flores al lado de su cama.

 

"No te preocupes. Se las robé a un tipo en el pasillo con una pierna

rota. Él... no fue capaz de poder alcanzarme."

 

"Siempre eres así, pero gracias Geni. Siempre has sido un buen

amigo."

 

Engel sonríe ligeramente mientras palmea el hombro de Yelena. Ella

lentamente cierra los ojos hasta quedarse dormida. Él estira la mano

para acariciarle el cabello, pero se detiene, se da la vuelta y sale de

la habitación.

 

 

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Engel se encuentra en su lugar favorito, una de los largos pasillos

de la nave, justo bajo la estructura del puente. Desde allí tiene una

vista de todo el frente de la nave, los dos portaviones y de las

relucientes estrellas más allá. Pensativo estira su mano y la pone

sobre el cristal. Esta helado. Contempla su mano apoyada en el cristal

por un momento. Mira fijamente los ahora inexistentes dedos medio y

anular, recordando que hoy se cumplen exactamente dos años desde que

los perdió.

 

Han sido dos años increíbles para el.

 

En el principio estaba en el sitio mas hostil de la tierra, el

circulo polar ártico, jugándose la vida contra la persona que

consideraba en ese instante su mayor enemigo. Luego, luchando contra la

misma persona, en las mismas condiciones pero en condiciones

diferentes, en el calor del océano pacifico. Pero esta vez, no sabría

decir si victorioso, aunque fue un verdadero empate.

 

Hace solo un año se unió a la Spacy con el rango de Capitán, en uno

de los sitios mas hostiles para cualquier forma de vida conocida. En el

frió vació del espacio. Antes de poder continuar con sus meditaciones,

una enérgica mano se posa sobre su hombro. Sobresaltado, pero sin

perder su semblante tranquilo voltea la vista para encontrarse con el

Mayor Focker, quien tiene su vista fija en el mismo paisaje estelar.

 

"Focker, ¿qué te trae por aquí?". - pregunta Engel, aun recargado

del cristal.

 

"Caminando y casualmente te encontré"

 

"Esta nave es demasiado grande..."

 

"Te seré honesto. Fui a visitar a Nikolayev en el hospital y me dijo

que te la pasas aquí."

 

"Si, solo recordaba."

 

"Entiendo a lo que te refieres. Estoy en las mismas. Aun que creo

que tu te llevaste la peor parte, y tiene todo el derecho del mundo de

estar así."

 

"¿Así como?"

 

"No se, pensativo sobre todo y nada."

 

"Quizás tengas razón". - dice Engel apartándose de la ventana. "Creo

que aun me falta mucho por aprender y por entender."

 

 

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"Bueno gente, bienvenidos. Soy la Mayor Yelena Nikolayev, llevo

bastante tiempo en la Fuerza Aérea de la Naciones Unidas. Si alguno de

ustedes cree que este trabajo se presta para divertirse volando

avioncitos y lidiarse a tiros, puede marcharse ahora mismo. En estos

momentos seré su instructora en cuanto a la teoría de los vehículos que

pilotaran. Se trata del VF-1A Valkyrie..."

 

La Yelena se encuentra de pie, delante de una gran pantalla donde se

muestran las partes de un Valkyrie, para explicar las características

de este aparato. En la sala hay unos veinte muchachos, todos ellos

sentados, en silencio. Algunos toman notas, mientras que otros

disimuladamente cuchichean sobre lo que dice la instructora.

 

"Por el momento es la versión que pilotaran en combate. Existen la

variantes VF-1D versión biplaza del VF-1A. VEFR-1 biplaza diseñado para

desempeñarse como AWACS (misiones de rastreo de blancos, interferencia

de señales y reconocimiento) incluye un plato de radar montado en su

fuselaje. VT-1 biplaza de entrenamiento, el cual volaran el los

próximos días y el VF-1J especialmente equipado para lideres de

escuadrón y de grupos de ataque..."

 

Hace una pausa cuando la puerta del fondo se abre. Aparece el

Capitán Engel, que inmediatamente se deja caer en una silla desocupada

en el fondo del aula.

 

"La planta de poder consiste en dos turbinas de reacción

termonuclear modelo FF-2001. Cada uno puede generar 11 500 kilos de

empuje y llegar a los 22 600 en post-combustión. Adicional a eso, y es

algo de su interés inmediato, es que posee dieciocho motores vernier

para maniobrar en el espacio. Existen dos propulsores para anular el

empuje horizontal colocado en los lados de los deflectores de capa

limite, aquí y aquí, los números 25 en el diagrama. Por lo general

estos propulsores son demasiado ‘lentos’ sobre todo en combate, por lo

que utilizamos mas la reversión de impulso con los propios motores

principales en modalidad Gerwalk. En total el modelo VF-1A, la unidad

que ustedes volaran, lleva una reserva interna de 5800 kilos de

combustible, lo que les da un alcance en el espacio de 8800 kilómetros,

explico, ida y vuelta..."

 

Al fondo del aula, el Capitán Engel tiene que esforzarse por no

sonreír. «Ese tipo del fondo es mi compañero y es quien los masacrara

en los simuladores» pero no, pensó Engel. No era cuestión de que se

asustasen y echasen a correr.

 

"Como armamento estándar, llevan un cañón externo de 55 mm GU-11 de

tres barriles y cargador espiral, montado en el centro y debajo del

fuselaje en modo caza, en la mano o anclado en el brazo en modo Gerwalk

y Battroid. Con una potencia de disparo 1200 rondas por minuto, aunque

la munición solo llega a cuatrocientas, así que deben tener cuidado de

no gastarlas todas en largas ráfagas..."

 

Se detiene un momento para mirar a los muchachos, muchos de ellos

difícilmente llegan a los dieciocho años.

 

"En definitiva, irán ustedes armado con un arma fantástica, lo

máximo en tecnología, pero con ciertas limitaciones. Tendrán que

sobrevivir utilizando su cabeza y apoyándose en los demás, los

individualistas están en los cementerios. A veces, sus vidas correrán

peligro, pero la única forma de sobrevivir, es cubrirse unos a otros.

Yo he perdido a varios amigos en distintas misiones por cosas así."

 

Todos los alumnos asientes muy serios.

 

"¿Tiene algo de bueno este trabajo? ¿Tiene algo bueno ser piloto?

Respuesta: cada vez eliminan a un enemigo le salvan la vida a sus

compañeros. Aquí, cuando hacemos nuestro trabajo bien, nuestras...

vidas estarán a salvo. No lo olviden. Bueno gente, tendremos un

descanso. La próxima clase se las dará el Teniente Batou.

 

Finalmente todos se ponen de pie, saludan y se disponen a salir.

Nikolayev se queda sentada en el borde de la mesa mientras los

muchachos salen. Al final quedan los dos solos, aunque es ella es la

primera en levantarse y caminar hacia la puerta.

 

"¡Bravo, Lena! ¿Dónde he de firmar?". - exclama Engel, mientras le

abre la puerta y salen al pasillo.

 

"No te burles, Geni. Tenia que decirles algo, ¿no?". - dice sacando

un cigarrillo y encendiéndolo.

 

"Yelena, ¿Cómo llamas cuando una persona de alto rango te miente con

el mayor descaro?". - pregunta Engel, con una irónica sonrisa.

 

"Disciplina."

 

 

 

[Fin Capitulo 2]

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Notas / divagaciones del autor:

 

Primer ataque exitoso por parte del Macross. La batalla de Saturno fue

la primera experiencia de combate de Hikaru Ichijou (mal conocido como

Rick Hunter) y de muchos otros pilotos.

State = Continuará/To Be Continue

feedback = Sí/Yes