Fic Name: Dont look back
Capitulo 9
Autor San san
AP
Las 18.45 pm y los habitantes de ciudad Macross se aglomeraba alrededor de las pantallas gigantes distribuidas en toda la nave atentos para escuchar la conferencia oficial que daría el Almirante Gloval; dentro del estudio donde se transmitiría el anuncio las pruebas de sonido junto con la especulación crecían desmesuradamente mientras la hora prevista se acercaba. Los técnicos de sonido, militares y productores expectantes esperaban la llegada del Almirante, la información que se daría era clasificada, asi que ninguno de los presentes tenía idea de lo que el hombre que los regreso a la tierra les diría.
Entró al estudio con una serenidad extraña, miraba hacia el frente como intentando evadir todas las miradas expectantes, dentro de si llevaba un vacio que la derrota le dejo, un peso enorme amenazaba con hacerlo caer, pero dentro de todo el remolino emocional, a su lado caminando tras de el se encontraba la Capitana Lisa Hayes que claramente se encargaba de todas las dudas salidas de la producción. Desde que salió de su oficina con su uniforme de gala la encontró lista para caminar con el hasta el mismo infierno si era necesario, recorrieron en silencio los pasillos de la nave, cada uno con sus propios pensamientos, y al llegar al lugar indicado ella se aseguró de dejarle firme que ella estaba ahi con el, y que lo apoyaría en cualquier cirscunstancia.
Subio al podium desde el cual daría el anuncio, clarifico su voz y bebio un poco de agua, las cámaras se encendieron y su rostro se transimitio en todos los lugares recónditos de la nave.
- Buenas noches habitantes de Ciudad Macross, gracias por atender al llamado de urgencia para hacer esta conferencia; de corazón quisiera que este anuncio trajera buenas noticias, pero desafortunadamente no lo es. Desde que llegamos a la tierra establecimos contacto con las autoridades del gobierno de la tierra unida, con el único propósito de establecer los procedimientos para que ustedes pudieran abandonar esta nave. Pero se nos fue negada su reincorporación a la tierra, intentamos pedir la reconsideración de la desición tomada por el alto mando pero fue inutil, las consecuencias fueron desastrosas tanto para el Sdf-1 como para ciudad Granite, tras dichos eventos hemos….hemos recibido la órden de abandonar la tierra inmediatamente
La noticia fue recibida con la reacción esperada, muchos habitantes soltaron insultos a todos los militares de la nave, otro dieron a pie al enojo que los poseyo inmediatamente y otros mas se perdieron en sus pensamientos tratando de analizar y procesar la información recibida
- Se que los que les estoy informando no es facil de entender, pero creanme amigos que esto es tan dificil para mi como para ustedes, les pido apoyo en esta orden que tendremos que acatar en menos de 48 horas
Fuera del estudio los gritos de protesta no se hicieron esperar, la puertas empezaron a ser fuertemento golpeadas tratando de conseguir acceso, en la ciudad los ciudadanos insultaban y atacaban a los militares que se encontraban a su paso
- Les pido paciencia….se que…
Hasta ahi llegó el temple del Almirante Gloval quien al escuchar la estrenduosa respuesta de los habitantes de ciudad Macross no pudo articular más palabras, no logro sostener la vista de frente, y un silencio abrumador se apoderó de el.
Las personas presentes en el estudio quedaron sin habla, no daban crédito a lo que escucharon minutos antes, algunos buscaron apoyo en mesas, sillas y paredes, todo lo que imaginaron al llegar a la tierra empezó a derrumbarse con una rapidez inconcebible.
Y como saliendo de la nada la persona menos pensada mostro un poco de madurez que en muchas situaciones hizo falta, Minmey subió al estrado y tomó uno de los microfonos con la sonrisa cándida que muchas personas adoraban
- Yo..yo no entiendo nada que tenga que ver con política, pero lo que si se es que la única manera de que podamos sobrevivir es mantenernos unidos, siento que el Sdf-1 es mi hogar ahora, todos hemos pasado por situaciones súmamente dificiles, pero dense cuenta en los fuerte que nos hemos vuelto, yo tengo más amigos aqui que los que tenía en la tierra, todos ustedes han sido como una gran familia para mi; y estoy segura que con la ayuda de las personas que comandan esta nave tarde o temprano regresaremos a la tierra, seguiremos teniendo esperanza, y por ahora me siento súmamente orgullosa de ser una ciudadana de Ciudad Macross y de esta nave.
A muchos esas palabras les llegó al corazón, aun contenían rabia pero se dieron cuenta que no podrían hacer nada al respecto, con violencia y protesta solo lograrían que la paz lograda dentro de la nave se perdiera en minutos.
El Almirante Gloval hizo un ademán para que se apagaran las cámaras y se dirigió a su Segundo al mando
- Capitana prepare todo, despegaremos lo más pronto posible, la veré en el puente
En el Puente el terrible trio no pudo contener las lágrimas que se desbordaban por los ojos, ellas tampoco estaban enteradas de la desición tomada por el alto mando, por lo que la noticia les oprimió el Corazon de la misma manera que a los ciudadanos de Macross.
El beep de la puerta del Puente se escuchó anunciando la llegada del Almirante Gloval seguido por la capitana Hayes que se dirigió directamente a su estación de control. Por su parte el Almirante tomó asiento en su tradicional silla y espero mientras los propulsores y motores estuvieran listos para el despegue
Claudia entendía el sentimiento de tristeza de todos lo que operaban en el Puente y haciendo honor a su ya conocido sentido del humor espetó:
- Vaya, estoy segura que las orejas de los miembros del alto mando deben bien estar calientes de tantas maldiciones y mentadas en su honor, asi que señoritas no dejémos que nos pase lo mismo a trabajar, tenémos una nave que levanter!
- Habla la Capitana Hayes a todos los encargados del area de sistemas preparen todos los propulsores y motores para despegar dentro de 20 minutos
- Sammie ¿están listos los radares y sistemas de gravedad?
- Si comandante Grant, los radares estan casi al cien por ciento de su capacidad
- Vanessa…
- Mis sistemas se reportan listos y preparados para el despegue
- Control de propulsion reporta sistemas listos
- Gracias Kim, Lisa ¿los pilotos tendrán llamado?
- Si Claudia, solo en caso de emergencia
- Atención todos los pilotos en turno prepárense para salida en caso de emergencia, repito preparen sus cazas en caso de emergencia, la cuenta regresiva esta en curso, un minuto para despegue y contando
En el hangar el Lider del escuadrón Skull revisaba sus controles dentro de su cabina, tenía sentimientos de tristeza y desepción, pero igual que a muchos las palabras de Minmey le dio un poco de aliento para continuar
- Skull uno a delta uno, escuadrón Skull preparado
- Enterado Skull uno, dare aviso en caso de ser necesaria su salida
- Lisa…hay algo que quiero decirte antes de que dejémos la tierra…
Los ojos de Rick se veían transparentes de tanta mezcla de emociones, la cuenta regresiva continuaba, los motores rugían más fuerte al llegar al estado necesario para el despegue, al ver la expression de aquel hombre en su pantalla se tomó unos segundos para escuchar lo que tenía que decirle
- ¿Que pasa Rick?
- Quizá no es el mejor momento pero…quiero que sepas que… mientras estés conmigo, iré hasta el otro lado de la galaxia si es necesario, mi hogar es donde estes tu…solo quería que lo supieras…
Una solitaria lágrima resbaló por una de sus mejillas mientras una sonrisa indescriptible se formaba en su labios
- Este es el mejor momento Rick…estaremos juntos en esto y en todo lo que venga, por que te amo y siempre te amare…Delta uno fuera…
Todo lo dijeron por el canal abierto, que más daba, estaban siendo desterrados de su hogar y no sabrían si algún día regresarían asi que lo que menos importaba era que todos se enteraran que entre ellos creció un amor que trascendería el tiempo y el universo.
Uno de los miembros del Skull, apretó los puños mientras claramente escuchaba la voz de Lisa “te amo…y siempre te amaré” la mente le decía que la resignación era necesaria, pero el corazón obstinado le decía a gritos que la esperanza era lo ultimo que se perdía, reviso sus controles una vez más y anuncio a su lider un “Skull 5 listo”.
- Almirante todos los sistemas de la naves están listos, esperamos su órdenes
Tardó unos segundos en responder, su alma estaba en tregua, y pedía a Dios si es que existia que le ayudara a mantener a salvo a toda la gente que llevaba consigo
- Vamos a regresar…tarde o temprano regresaremos…
Con esa última órden todos lo que estaban bajo el mando del Almirante Gloval tuvieron una chispa de esperanza, uno a uno para sus adentros se despedía de su amada tierra mientras la nave se elevaba hacia el cielo alejandose poco a poco de la superficie terrestre. Los resplandores del sol, la hacían ver mucho más grande de lo que ya era, implacable y digna dejaba mientras se elevaba, su marca en la historia de la tierra.
El tiempo transcurrió relativamente rápido, desde el Puente el personal en turno observaba el globo azul que parecía derramar melancolia y tristeza, o por lo menos eso era lo que sentía la gente que estaba a bordo del Sdf-1.
- Vaya…y pensar que cuando llegamos a la tierra ya me estaba saboreando uno de los helados haagen daz….
Los que escucharon el comentario de Sammie no supieron si darle un golpe por lamentarse por algo tan trivial como un helado o hecharse a reir por la inocencia y despreocupación con la que hablaba una de las oficiales más jovenes del Puente.
- Mejor que no lo lograste comer Sammie, digamos que el exceso de dulce se te empieza a notar en tu uniforme
- Ashh! Mira quien habla Vanessa, apenas te logra cerrar la chaqueta!
- ¡Claro que no! ¡eso quisieras envidiosa!
Como siempre las tres conejitas del Puente discutían árduamente sin importarles que el Almirante y dos oficiales ejecutivas las observaban con gracia al ser testigos de los desfiguros que ellas tres protagonizaban
- ¡Ya niñas! Hay cosas que hacer, en el almuerzo pueden seguir con su pelea
- ¡Pero Claudia! –dijeron las tres al mismo tiempo-
- E dicho y sera mejor que me hagan caso antes de que la capitana Hayes les arranque la cabeza a mordidas por insubordinación
Lisa al escuchar el comentario de Claudia se sonrojó a tal punto que si la luz se hubiera ido su rostro sería visto
- Y luego me preguntan de donde sale la reputación de mounstro asesino que tengo! ¡Claudia no ayudes por favor!
- ya ya…no seas enojona, necesitas tu dosis de Rick Hunter urgentemente
Lisa al saber que perdería la discución con su entrañable amiga intentó disimular su pena mientras regresaba a su consola y daba algunas órdenes para el vuelo de reconocimiento en turno.
- Si me disculpas, tomaré mi descanso…
- Claro que si cariño, el teniente Hunter debe estar esperándote
Antes de salir del Puente Lisa le dirigió una Mirada asesina que casi casi lanzaba fuego combinado con balas del más alto calibre, pero al ver la inmunidad con la que su amiga recibía su gesto solo respiró profundo y salió del Puente.
Caminó por los largos pasillos de la nave hasta llegar al destino previsto, la cafeteria parecía haber recuperado el mismo ritmo de antes, pilotos, técnicos y personal administrativo llenaban las mesas, el sonido de voces mezcladas en el aire al principio pertubaban un poco pero después de un rato se hacía costumbre.
Como siempre la Capitana Hayes tomó asiento en una de las mesas más alejadas de la gente y del bullicio, las conejitas del Puente hubieran tomado asiento en la mesa más cercana para lograr pescar los chismes mas recientes, pero como ella solo buscaba tomar una taza de café esperando ser acompañada por un piloto en especial el lugar en el que estuviera le era indiferente.
Ordenó una café Americano grande y en cuanto tuvo la humeante taza la tomo con las dos manos mientras aspiraba el cálido aroma, se tomó el tiempo de cerrar los ojos y de disfrutar de la sensación de algo tan simple, pero eran ese tipo de cosas las que ella apreciaba más. Seguramente logró perderse en el tiempo por algunos segundos puesto que no sintió cuando el comandante Hunter se acercó a ella para darle un beso en la mejilla y sentarse frente a ella.
- Espero esa expresion tuya se deba a lo feliz que te pone verme
- Siento decirte Hunter, pero ni siquiera tu logras igualar el placer de tomar un café
- Soy mejor que eso
- Eres un ególatra ¿como esta tu escuadrón? El lider del escuadron Prometheo me reporto muchos pilotos que se negaban atender las órdenes en señal de protesta
- Hay muchos pilotos que no están conformes, pero a la larga creo que logran entenderlo, por lo menos en el Skull se siente el apoyo incondicional.
- ¿No te sientes cansada? estos últimos días han sido una locura
- Un poco, nada que una taza de café no pueda resolver
- ¿A que hora terminas tu turno hoy?
- Estaré libre a las ocho ¿por?
- ¿Te parece bien si paso por ti al puente?
Lisa se quedó por unos segundos callada, en algún momento ella y Rick lograron establecer una comunicación nunca antes lograda, convivían con una familiaridad infinita, incluso se estaban comportando como si fueran una pareja regular que intentaba coordinar sus horarios
- Si...a las ocho esta bien
- ¡Perfecto! Señorita tengo que irme, necesito terminar mis reportes antes de las ocho por que deje le digo que mi capitana es demasiado exigente, y si no le entrego a tiempo se puede llegar a convertir en un verdadero mounstruo asesino
- ¡Eres un menso!
Rick se acercó a ella y le dio un beso corto cargado de ternura , le guiñó el ojo y se dio la media vuelta en dirección al hangar. Lisa a duras penas logró reaccionar después del incidente, parpadeo un par de veces, sonrió una vez mas y de un trago terminó su café.
Las siguientes horas en la nave fueron cruciales, todos estaban atentos ante posibles incidentes relacionados con la inconformidad de los civiles, pero para sorpresa de muchos la gente retomó con bastante rapidez sus actividades regulares.
Un hora antes de que Lisa terminara su turno Sammie le informó que tenía una llamada para ella en una de las líneas del puente, un tanto extrañada por el asunto y convencida de que no sería Rick puesto que el siempre le llamaba a su celular, tomó la llamada
- ¿Si diga?
- Lisa soy yo...Karl
- Karl no tengo tiempo para discutir, estoy en turno
- No quiero discutir, necesito hablar contigo...por favor, es importante
- Karl...no creo que sea buena idea
- Por favor, de verdad necesito hablar contigo
Lisa miró el reloj de su muñeca y se dio cuenta que aun faltaba poco más de una hora para que Rick llegara por ella, respiro profundo y acepto
- Nos vemos en cinco minutos en el mirador que esta cerca del puente
- Ahi estare
- en un momento voy para alla
- Lizzie...
- ¿Que pasa Karl?
- Gracias....
- De nada...
Rápidamente termino con algunos pendientes y preparo su consola para el siguiente turno, tomó su celular de su estación de trabajo y caminó hacia el mirador. Aun seguía molesta por la actitudad que Karl había tomado, incluso llegó a pensar que jamás lo perdonaría, pero aunque le costara admitirlo el era alguien importante, quizá ya no era el hombre con el quería compartir el resto de su vida, pero si era como un hermano le apreciaba profundamente. Al llegar al mirador vió que Karl estaba sentado en una de las bancas, se le veía triste, miraba hacia la misma dirección y parecía no respirar.
- Perdón por el retraso....me entretuve de más
Karl se puso de pie para ofrecerle asiento en la banca
- No te preocupes, gracias por venir; por favor toma asiento
- Y bien ¿que pasa?¿te encuentras bien?
No respondió, mantenía la mirada fija en el suelo, quería hablar pero algo se lo le impedía. Asi permaneció por varios minutos, sin formular alguna respuesta
- Karl...habla....me estas asustando....
Sin previo aviso Karl se postró sobre sus rodillas y tomó las manos de Lisa para apretarlas fuertemente contra su frente, aun tenía la mirada en el suelo y gruesas lágrimas comenzaron a fluir por sus ojos
- Perdóname.....por favor....pérdoname......
A Lisa el acto la tomó totalmente desprevenida, jamás pensó ver a Karl en ese estado, sumido en una tristeza descomunal que parecía no tener control
- Karl por favor levántate...esto no es necesario...
Sus esfuerzos fueron inutiles, el seguía en la misma posición dando rienda suelta a todo el dolor que guardo para si durante tantos años, sus manos aun apretaban las de Lisa y sollozos grandes se escapaban de su boca mientras su cuerpo temblaba por el llanto
- perdón...perdón....todo esto es mi culpa...todo....y parece que no aprendo la lección por que sigo siendo un imbecil....juré no lastimarte nunca más.....y todo este tiempo e hecho todo lo contrario...yo....yo sientooo que me estoy muriendo Lisa....siento que mi alma esta dejando mi cuerpo y no se que hacer....y se que soy un egoista por que tu no tienes por que estar aqui escuchando....pero no tengo a nadie más....perdóname....perdóname. ....
Las lágrimas de Karl rodaban por su rostro descontrolablemente. Lisa se consideraba orgullosa y a veces súmamente rencorosa, pero al ver al hombre que fue su centro durante tantos años, perdido en el dolor con el alma destrozada no supo hacer otra cosa más que tomar la cabeza de Karl y posarla sobre su regazo envuelto en un abrazo que tenía un único propósito: reconfortar.
Suavemente bajaba y subia su mando por la espalda de Karl mientras le decía calidamente que todo estaría bien
- Todo estará bien....tranquilo......no estas solo......
Siempre se consideró un hombre impaciente, aun faltaba casi media hora para que Lisa terminara su turno pero sus ganas de verla era tan incontrolables que mucho antes de la hora acordada se dirigió al puente con la idea de esperarla afuera.
No tomo el camino corto con la idea de hacer tiempo, el camino que tomó lo hacía atravesar por el mirador para luego tomar un largo pasillo que intersectaría al pasillo que llevaba al puente. SIlbaba la melodía de una de sus canciones favoritas, caminaba distraido evitando la poca gente que se encontraba en su camino y su silbido paró de súbito al ver una de las escenas que deseo nunca más volver a ver.
En una de las bancas frente al gran ventanal, la capitana Hayes su Lisa estaba sentada abrazando fuertemente a Karl Riber, amorosamente subía y bajaba su mano por la espalda de Karl mientras parecía decirle frases al oido, el por su parte rodeaba su cintura con sus brazos mientras escondía su cabeza en el regazo de ella.
Las peores ideas le llenaron la cabeza, entre ellas una reconciliación inesperada de Lisa y Karl; no podía ser otra cosa puesto que una escena asi no la protagonizaban un par de amigos, su respiración se hizo cortada, una realidad tormentosa le cayó de lleno sobre sus hombros y una desepción insostenible le lleno el corazón irremediablemente.
No sabía que hacer, o como reaccionar, quería caerle a golpes a ese hombre que no dejaba de interponerse en su camino, pero eso no le ayudaría en nada, se dio la media vuelta, al parecer Lisa ya no llegaría a su cita, asi que dirigió sus pasos a su barraca con la incertidumbre de que vendría después.
Poco a poco Karl encontró un poco de serenidad en medio del vació en el que se encontraba, era como un niño que buscaba refugio desesperado en los brazos de su madre, lentamente relajó sus manos y se separó de los brazos de Lisa
- me siento como un idiota...
- No digas eso...todos hemos pasado por momentos dificiles, pero Karl no estas solo, siempre contarás conmigo
- pero no de la manera que yo deseo...
- Karl, las cosas han cambiado, perdóname pero no puedo ofrecerte más que mi amistad
- Lisa ¿en verdad amas a Rick Hunter?
- No se trata de si lo amo o no....sino de que a ti ya no te amo de la misma manera, algo cambió y no quiero ni pretendo mentirte, ninguno de los dos merece vivir en una mentira
- Lisa se que no me e comportado de la mejor manera...pero...
- Karl no tiene caso, estoy segura que tarde o temprano encontrarás a alguien que te quiera de la misma manera
- A mi no me interesa otra mujer, me interesas tu....
- Piensas eso por que aun esta muy reciente lo nuestro, pero tanto como tu como yo necesitamos tiempo
- Tal parece que tu no necesitaste tiempo...
- Karl...no toquemos ese tema....
- Pero necesitamos hablar de ello, yo estoy seguro que ese Hunter no te quiere como dice hacerlo
- Ese no es el punto, si me quiere o no...es mi problema
- También es el mio! yo no quiero que salgas lastimada
Lisa miró el reloj y vió que Rick no tardaría en llegar al puente
- Karl me tengo que ir ¿vas a estar bien?
- Vas a verlo ¿no es asi?
No queriendo discutir mas Lisa se puso de pie y le dió un beso a Karl en la mejilla
- Cuentas conmigo....por que siempre serás alguien muy importante en mi vida
Con esas últimas palabras la capitana Hayes corrió en dirección al puente, su encuentro con Karl había sido muy intenso pero de alguna manera fue casi terapeutico para ambos, en silencio sin necesidad de palabras tuvieron una reconciliación en donde ambos perdonaron cosas que les impedía continuar como amigos.
Agitada por la carrera dada llegó al puente pensando que había logrado llegar antes que Rick, aun no sabía si le comentaría a el sobre su inesperada reunión con Karl, pero por lo pronto solo le interesaba verlo, una necesidad urgente de estar con el la poseia cada vez que sabía que se encontraría con el. No entró de nuevo al puente, aguardó en el pasillo principal recargada sobre la pared esperando pacientemente la llegada de su piloto.
"8:45, ya se retrasó demasiado...¿le habrá pasado algo?" sacudió su cabeza para dejar ir tantos malos pensamientos y saco su móvil, marcó al celular de Rick pero no obtuvo respuesta, "quizá se quedó dormido en su barraca" de nueva cuenta intentó llamar a su celular pero nada. Guardó el aparato en su bolsillo y se dirigió a la barraca de Rick.
Al llegar a su destino se paró frente a la puerta y tocó tímidamente, no obtuvo respuesta. La desesperación creció mas y volvió a tocar con más fuerza, débilmente escuchó ruidos dentro de la barraca y pasos que se dirigían a la puerta. Léntamente la puerta se abrio dejando ver a un Rick serio en una oscuridad casi total dentro de su casa, tenía las pupilas fijas en ella y su rostro no mostraba ninguna expresión, jamás lo había visto asi.
- Hola....te estuve esperando y me preocupe.....olvidaste que irías por mi?
- No, no lo olvidé
Su respuesta fue fría y cortante
- ¿estás bien?
- Me encuentro en perfecto estado, lo que no se es a que veniste a mi barraca?
- Que te pasa! acordamos vernos y no llegaste! pensé que te habría pasado algo...por eso vine
- Bien ya me viste, estoy bien...ahora puedes irte
- Rick ¿por que me hablas asi?
- Mira, no es un buen momento, no quiero hablar contigo….
- ¿De que hablas?
- Mire Capitana Hayes no quiero hablar con usted, asi que si me hace el favor le pido que se vaya, su presencia a empezado a molestarme
- ¿Estás hablando en serio?
- Muy en serio, yo me siento muy confundido….no se que pensar
Rick tuvo que desvíar la mirada para no ver como los ojos verdes de ella se llenaban de lágrimas, el rostro de Lisa pareció palidecer más de lo normal, y su rostro destilaba un dolor puro nacido desde el fondo de su corazón. Al verla tuvo que contenerse sobremanera para no abrazarla de inmediato, pero si ella no sabía como terminar su relación con el, el le haría el favor, asi le doliera cada fibra de su ser prefería no tenerla que tenerla a fuerza.
- Bien....bien...es bueno saberlo, perdona por haberte venido a molestar....no era mi intención....
Conteniendo sus lágrimas con el afán de defender un poco del orgullo que le quedaba apretó sus manos y se despidió de el de manera militar. El tiempo pareció detenerse mientras caminaba rumbo a su barraca, y en el último lapso antes de llegar a su barraca corrió buscando refugio dentro.
Cerró su puerta y se dejó caer sobre su sillón ¿que había pasado? todo estaba bien, al dejar la tierra ambos se dijeron un "te amo" ¿que cambió? ¿Por que el destino se tornaba tan cruel con ella cuando el panorama comenzaba a sonreírle? Se dirigió a la cocina, tenía la boca seca, necesitaba tomar algo, en el trayectó se encontró con el control remoto de su aparato de sonido y lo encendió.
Las lágrimas le inundaron los ojos mientras la canción que se reproducia en la radio le recordaba de la peor manera la lamentable situación en la que se encontraba, cuando el vaso de agua se llenó y el agua comenzó a desbordarse las fuerzas la abandonaron y se dejó caer sobre el suelo de su cocina, soltando finalmente los sollozos que le apretaban el pecho desde su encuentro con Rick.
El corazón le dolió cuando la observó irse, la rabia y el dolor de ver a Lisa con Karl hablaron por el mientras ella estaba parada frente a su puerta. Al cerrar la puerta una ira iracunda se apoderó de el, se sentó sobre la cama en total obscuridad mientras una canción sonaba en la distancia.
Tantas bellas palabras
Que me decias
Tonto y enamorado
Que me tenias
Tus caricias vacias
Me las creia
De tus besos y abrazos
Me derretia..
Me engañaste y dejaste
Lastimaste a mi pobre corazon
Ya no quiero ver tú foto en mi buro
Vete que ya te tengo olvidado en un cajón
Y todo este tiempo te he mentido
Pues tus besos no son lo mejor
Me propuse olvidar
Y madurar
Volvere a empezar
Y lo voy a lograr
Te dejé en el pasado
Haz quedado olvidado corazón
La noche acosó a dos personas en lo que sería la primera noche desde su exilio de la tierra. Dos personas lloraban en la soledad de sus habitaciones atormentadas por un malentendido que pondría a prueba el amor inmenso que crecía poco a poco entre ellos.
Los insistentes “Beeps” de su despertador al fin la despertaron, se sentía sumamente cansada como hacia mucho, miró la hora aun tenía una hora para entrar al servicio pero por alguna razón no tenía ánimos, al recordar la escena en la puerta de Rick de nueva cuenta los ojos se le nublaron. Viendo fíjamente el techo una idea le rondaba por la cabeza incistentemente, no era la clase de cosas que ella solía hacer pero en verdad se sentía muy cansada asi que tomó el auricular y se comunicó al Puente.
- Habla la Capitana Hayes ¿ha llegado ya la Teniente comandante Grant?
- Si señora, se la comunico
- Habla Grant
- Claudia soy yo…Lisa….solo hablo para avisarte que hoy no podré presentarme al servicio, no me siento bien. Le avisas al Almirante por favor?
- ¿Estas enferma? ¿Quieres que te vaya a ver?
- No…solo que me siento cansada y a decir verdad no tengo mucho ánimo de ir al trabajo
- ¡Vaya! Jamás pense que te escucharía decir que no tienes ánimos de trabajar ¿esta todo bien Lisa?
- Si, solo necesito descansar…mañana nos vemos
- Esta bien…te hablo en la noche, cuidate
- Gracias!
Claudia Grant colgó el telefono con bastante desconfianza, algo le pasaba a Lisa y tenía que ser serio para que ella decidiera no ir al servicio, no podia dejar de preocuparse era lo más cercano que tenía de familia, las últimas semanas no habían sido nada fáciles para todos los que estaban en la nave, pero sabía que Lisa tenía mucha tención desde la llegada de Karl un estress bastante notorio comenzo a notarsele y quizá habia tocado fondo. Preparo su consola el Skull saldría en unos minutos.
- Habla la Comandante Grant, escuadron Skull tiene pista libre las coordendas de vuelo estan siendo enviadas en este momento a su consola
Desde la noche anterior una punzada extraña le clavaba insistentemente el corazón, después de que el berrinche se le bajó razonó mejor las cosas y cayó en la cuenta de que lo mejor hubiera sido hablar con Lisa para dejar las cosas claras, pero hizo todo lo contrario, fue hostil, desconsiderado y en extremo hiriente. Al despertar su primer idea fue llamar a la barraca de Lisa pero consideró mejro verse en turno e intentar hablar después de su patrullaje, pero todo lo planeado se vino abajo cuando vio en su consola nada mas y nada menos que el rostro de Claudia Grant, los ojos verdes que tanto adoraba ver esta vez no lo guiarían por la red táctica.
- Roger Delta uno. ¿Claudia la Capitana Hayes esta en alguna junta?
- No, esta mañana se reportó enferma, esperemos mañana se encuentre mejor
- ¿enferma? Pero anoche la vi y estaba en perfecto estado
- Aqui Riber, ¿es de cuidado el estado de Lisa?
Ese fue el acabose, Un enfado barbaro poseyó a Rick, un enojo lleno de desesperación y frustración
- Nadie le dio permiso para hacer contacto con el Puente Tenienten Riber
- me importa un Diablo el permiso, para mi es mas importante saber si Lisa se encuentra bien
- ¡Basta los dos! Les recuerdo que están en medio de un patrullaje, la información es asi de simple la capitana Hayes se reportó enferma, asi que dejen de comportarse como un par de chiquillos y concentrense en su mision!
El regaño de la Comandante Grant los dejó a los dos helados, rara vez ella perdía la compostura asi que para su propio bienestar dejaron la riña para luego y regresaron su atención al patrullaje.
Los minutos se le hicieron horas y las horas años, nunca había sentido un ansia tan grande por que el patrullaje terminara, sentía unas ganas incontrolables por regresar a la nave e ir en busca de ella para pedirle la más grande disculpa aunque fuera de rodillas si era necesario; claro que también le urgía una explicación de ella por el incidente el día anterior con Karl, pero eso era secundario, solo quería verla.
Al entrar el Skull uno al hangar su piloto bajó de un brinco, un nervio insistente le recorría el cuerpo, atendió rápidamente al técnico que se hizo cargo del Skull en el momento en que el lider se alejó en dirección al sector de viviendas militares.
Jamás en su entera vida se había sentido como en ese día. Dicen que lo que más criticas es lo que mas te hará sufrir, ese día comprendio que era cierto. Durante mucho tiempo se burlo de todas las novelas, peliculas de cine o canciones en donde ilustraban a una protagonista sufriendo entrañablemente a punta de lágrimas por el amor no correspondido, en mas de una ocación expreso la ridicules de una situación asi, pues bien ahi tenía su castigo Lisa Hayes. Desde primeras horas de la mañana se sumió en una depresión absurda, lloraba por cualquier objeto o recuerdo que le trajera a la mente Rick, incluso como queriendo continuar con esa tortura china se empeñó en buscar dentro de su música las canciones más dolidas existentes en el planeta.
Y para colmo no reunio animo suficiente para tomar una ducha, decidiendo mejor pasar la tarde recostada en su sillon con la pijama y con un litro de helado de chocolate que poco a poco era devorado por ella.
- Que patético – se repetía una y otra vez al darse cuenta de su estado. ¡¡Pero es la primera y última vez que te sufro asi Hunter!! Es mas! En este momento dejo de hacerlo! ¡No lo mereces! ¡Piloto arrogante cabeza hueca! Y asi con el “orgullo en alto” se puso de pie dispuesta a olvidar por completo el rostro y el nombre de Rick Hunter.
A punto estaba de entrar a la ducha cuando el timbre de su casa repico en toda la estancia, desaliñada en pijama y con el peor de los humores de mala gana abrio la puerta para encontrarse nada mas y nada menos con el culpable de su estado actual. Con el temperamento que la caracterizaba apenas abrio la puerta vio quien era y en segundos le azoto en sus narices el frio metal de la puerta.
- ¡Lisa Abre!
- ¡Vete al Diablo!
- ¡Lisa Abre! Necesito hablar contigo!
- ¡Ah mira que casualidad! Ahora si quieres hablar conmigo después de lo que me dijiste anoche! Pues fijate que yo no quiero hablar!
- ¡Lisa vamos no seas inmadura!
Del otro lado de la puerta Lisa Hayes se transformó en un demonio verde con los ojos inyectados de una furia sorprendente, de su nariz y oidos casi casi salia humo del calor infernal que se apodero de ella al escuchar la frase “no seas inmadura” y con el caracter Hayes a tope abrió de golpe la puerta para gritar con el menor decoro una de las frases mas memorables en la relación que vendría con Rick Hunter
- ¡¡¡Te voy a demostrar lo inmadura que puedo llegar a ser piloto de cuarta cabeza dura!!!!
Pero antes de realizar las torturas planeadas en su cabeza para el piloto, Rick Hunter le dio el anitidoto para que su transformacion en el increible Hulk desapareciera, un beso primero tomado por la fuerza para luego poco a poco convertirse en una actividad súmamente placentera en la que ambos participaban. Casi privados por el aliento tuvieron que separase en busca de oxigeno y al instante los ojos de Lisa recuperaron la seriedad y el enojo antes de aquel “imprevisto”
- Como dije…no quiero hablar contigo
- Ya! Perdóname se que fui un idiota, hare lo que sea para que me disculpes
El diablito interior que todos llevamos dentro se despertó súbitamente al escuchar la frase “hare lo que sea”
- ¿Lo que yo quiera?
Sabía que tarde o temprano se arrepentiria, pero en ese momento no le importaba otra cosa mas que entrar a la barraca de Lisa y comerla a besos
- Lo que sea, solo si me prometes que hablaremos ahorita, creo que tenémos muchas cosas que dejar en claro
- ¡Trato hecho!
Lisa extendió la mano con la intención de sellar su trato, pero de nueva cuenta Rick la tomó desprevenida y la beso con la misma intensidad que momentos antes, y separandose lo suficiente para hablar le dijo
- ¿Podemos entrar?
- Esta bien…pasa
Al entrar a la barraca de Lisa, Rick casi ahoga un grito al ver el inusual desorden que se extendia por todo el lugar, Lisa al ver su expression se Adelanto a decir
- No te atrevas a preguntar o ahora si te mato
Lisa recogió lo suficiente como para que pudieran estar cómodos y se excuso por unos minutos para tomarse una ducha y cambiarse. Poco más tarde Lisa apareció en la Sala con unos pantalones deportivos y un top bastante ajustado que dejaba ver mucha piel, y para rematar con el cabello humedo, a Rick casi lo tira de la impression.
- Muy bien…de que quieres hablar
- Primero quiero pedirte una disculpa por como me comporte anoche, pero no pude controlarme, los celos se apoderaron de mi y muchas ideas me llenaron la cabeza.
- ¿De que hablas?
- Ayer, cuando iba en camino para recogerte en el Puente te vi…..te vi con Karl
- Ah…asi que fue por eso
- ¡Cómo que “ahh”! ¿te parece poco que te haya encontrado con el en las circunstancias en que te vi?
- Si me hubieras preguntado por esto ayer nos hubieramos ahorrado todo esto, no es lo que piensas
- Si ya se, pero creeme que no es nada agradable ver a tu novia abrazando a otro!
Por fin lo habia soltado, en todo ese tiempo ellos jamas habían aclarado cual era el estado de su relacion, y no precisamente acordaron ser “novios”
- Ahh…
- ¡Que te pasa! ¿No sabes decir otra cosa que no sea “Ahh”?
- Calmate, es solo que no se por donde empezar….
- Creo que sería bueno que me aclares lo que paso anoche con Karl
- El me llamo al Puente anoche, no lo escuche nada bien asi que accedi a verlo, no paso nada Rick, es solo que el trae muchos sentimientos guardados y necesitaba liberarlos, yo soy lo unico que tiene en la nave, y el para mi es como mi hermano, asi que no puedo dejar que muera de dolor, si necesita una amiga para desahogarse ahi estaré.
- ¿Te gustaria que yo hiciera lo mismo con Minmay?
La pregunta le cayó como bomba, claro que no le gustaba nada la idea, de hecho en solo pensarlo la piel se le erizaba
- No seria mi situación preferida, pero tendria que respetarla, por que yo confió en ti, confiaría en que tu nunca harías algo tan bajo
- Es solo que no aguanto Lisa, por mas que me digas que el no es nada para ti, me lleno de celos, tu eres….tu….eres mi….
Rick no quiso aventurarse a decirle por segunda vez, eso era algo que tenían que aclarar de una vez por todas, que eran, cual era el estado de su relación
- Lo que nos lleva al Segundo punto…¿que somos Rick?
- Yo…yo…pense que era claro…yo no soy alguien que se besa y abraza con cualquier persona, a mi me gustan las cosas serías, las relaciones abiertas nunca han sido lo mio
- A mi tampoco me gustan, por lo menos ambos estamos de acuerdo en que ese no es el tipo de relación que buscamos.
- ¿Entonces?…..
- ¿Entonces?…..
- No me lo vas hacer nada facil ¿verdad?
- Nop…sufre!
Rick observó la determinación de Lisa, a veces era desconcertante estar con alguien con un alma tan fina y transparente como la de ella
- Muy bien…pues si eso es lo que quieres…lo haremos como toda pareja….
- Me parece perfecto…soy toda oidos
Unos nervios locos se apoderaron de el, las manos le sudaban como si estuviera a punto de ser sentenciado a corte marcial, la boca se le secó y un nudo enorme se le formó en la garganta, y por mas que quería las palabras no le salían
- Lisa….yo….este….yo….me preguntaba si….si te gustaría ser mi novia?
Una sonrisa enorme ilumino la habitación, era la primera vez que alguien le pedía ser su novia, Karl propiamente nunca lo hizo, solo dejo que las cosas sucedieran hasta que era demasiado obvio como para atreverse a preguntar.
- No se….tengo que repasar mi lista de pretendientes
- ¡Lisa! ¡No seas mala!
La comandante Hayes solto una carcajada y se arrojó a los brazos de piloto buscando ávidamente sus labios para sobre ellos responder a su pregunta
- ¡Claro que si! ¡Me encantaria ser su novia comandante Hunter!
Ambos por la emoción cayeron en una ola de besos, abrazos y dicha, el amor que ambos sentán era claro, despues de esa noche ya no habría mas dudas, era oficial, el romance del comandante Hunter y la capitana Hayes ya no sería un rumor en los pasillos del la nave, ahora seria official, Rick y Lisa eran novios.
Notas del autor: Perdón por la mega demora, pero el trabajo estuvo cargadisimo y me limito mucho el tiempo. Tengo algunas notas aclaratorias
1. La situación del encuentro de Lisa y Karl. Creo y estoy convencida que el personaje de Karl que estoy creando no es malo, solo es una hombre que vive en carne propia los errores y las consecuencias de las decisiones tomadas en el pasado. Y pues pobre! Por ende esta perdiendo alguien que ama con mucha intensidad pero que en su momento cuando fue suya no la supo apreciar y valorar. Asi que decidi darle unos momentos para desahogar tantas frustraciones y arrepentimientos y dada la relación previa entre Lisa y el ellos aun conservan una conexión de apoyo mutuo.
2. La pequeña pelea o mal entendido entre Rick y Lisa se me hacia necesario, en el mundo real todas las parejas tenemos disuciones, malentendidos o desacuerdos, aunque la mayoria del tiempo derramemos miel las discuciones desafortudamente siempre estan presentes pero son estas las que vuelven las relaciones mas fuertes y maduras asi que aproveche esta situacion para al fin asentar la relación.
Bueno despues de estas pequeñas notas, de nueva cuenta les agradezco enormemente su tiempo para seguir esta humilde historia, espero reviews, comentarios, opiniones, lo que sea, lo que mas me importa es saber que les agrada un poco lo que se desarrolla en esta historia. Y para rematar como siempre GRACIAS GRACIAS GRACIAS!! Nos vemos en el próximo capitulo.